Es martes 13, hay un gato negro en mi camino y tengo que tocar madera

Superstición es la creencia contraria a la razón y a la ciencia que atribuye una explicación mágica a la generación de los fenómenos, procesos y sus relaciones.

La experiencia, mezclada con toda la información que recopilamos cada día de nuestra vida, hace que las supersticiones se vuelvan una cosa personal, un rasgo de nuestra personalidad.  Estas cosas quizás no tienen nada de malo, pero no podemos dejar que las supersticiones guíen y dominen nuestra vida. Por eso la principal superstición consiste en creer que aquello que más teme uno es lo que sucederá.

La historia de la humanidad está llena de pasajes misteriosos, de personajes famosos que se han encontrados en situaciones fortuitas o inesperadas y que se dejaban guiar por tales situaciones a veces por miedo o porque le inspiraban confianza.  Este comportamiento se ha convertido en una condición de muchos seres humanos, dando lugar a multitud de creencias, que han sido la base de las religiones y el oscurantismo  y a algo que es el tema que analizaremos: las supersticiones.

“Desafortunadamente a Dios se le conoce sólo por los desastres, disputas y locuras que ha causado sobre la tierra”, como dijo Paul Heinrich Dietrich en su libro “El buen sentido” .

Este libro hace un completo repaso de todas las desgracias que la religión, ese espejismo, le ha causado a su víctima: los seres humanos, con una premisa es básica y conocida: Dios no sólo no existe, sino que es una noción nociva que hay que descartar cuanto antes, al igual que pensar en la existencia de cosas sobrenaturales que influyen o determinan sobre nosotros.

Y esto es válido no sólo para la religión católica, sino para todas en absoluto, y además incluye a aquellos que hacen de su vida no lo que luchan por obtener, sino lo que creen que alguna especie de casualidad, suerte o probabilidad improbable pueda ofrecerles.

Hay más de uno que ha desgraciado su vida por completo, su felicidad, su familia, sus bienes materiales y hasta su propia tranquilidad y existencia, por estar cegado por cuentos de camino como los que nos brindan las religiones y las supersticiones.

Las supersticiones pueden ser simples o inofensivas, o terriblemente desastrosas para los que se fanatizan con ellas.  No hay nada en la vida que sustituya nuestras ansias de mejorar y ser felices, no hay ayuda divina ni nada que dependa del azar para ayudarnos. Depende de nosotros mismos y de nuestra capacidad de luchar y sobreponerse a las adversidades y errores y seguir nuestro camino sin tregua hasta alcanzar la meta que nos tracemos.

Por eso voy a comenzar con algo he conocido durante toda mi vida, qué es cómo reaccionan los cubanos ante este tema, que seguro que no difiere mucho del resto de la humanidad.

Supersticiones cubanas.

Los cubanos llevamos en nuestras raíces creencias que nos inculcaron nuestros antepasados y que forman parte de nuestra vida.  Vamos a describirlas, sobre todo para darnos cuenta de lo ingenuos que somos, a pesar de que nos consideramos muy inteligentes.

Pasar por debajo de una escalera es mala suerte.

Pudiera caerse o romperse cuando estés atravesando la misma; donde está el peligro está la mano del diablo que la empuja dicen los que creen en esto.

Tocar madera para alejar el mal.

Tocar madera es uno de los hábitos más generalizados en los cubanos. Si hablamos de cosas maliciosas, enfermedades, muerte o desastres, el tocar madera los aleja.

A este tema se les han dedicado varias canciones: Raphael con “Toca madera”. Ami Stewart con “Knock on Wood”, otras canciones de igual nombre de David Bowie y Eric Clapton y la famosa “Knock on Wood” de Eddie Floyd.

Hasta Frank Underwood lo ejecuta constantemente en la serie House of Cards, pero muchos de los que practican esta cábala no saben por qué se hace ni conocen su origen. Para que la práctica tenga los efectos deseados, no solo hay que tocar la madera, también hay que darle unos golpecitos. Lo primero sería para transmitir lo que queremos y lo segundo para agradecer.  

En unos lugares, se pensaba que los golpes servían para despertar y liberar a los espíritus que estaban encerrados en los árboles. Algunos indios americanos creían que dentro de la madera del roble, vivían los dioses.  Otra posible teoría está en el cristianismo, porque tocar madera era como estar tocando la cruz de Jesucristo que les iba a brindar protección.

Cruzar los dedos.

Si no quieres que algo suceda, cruza los dedos.  También cuando estás obligado a decir una mentira o juramento falso.

Dormir con medias puestas.

Como en Cuba casi nunca hay frío, no es costumbre dormir con medias, pero se dice que es de mala suerte, que si lo haces, el cerebro no descansa y llaman a los espíritus.

Mecer un sillón vacío.

El mecer un sillón sin nadie sentado invoca a los espíritus y es de mala suerte. Creo que era una de las cosas que más se cuidaba en mi casa, cuando era niño  de que no ocurriera.

Pedir un deseo si ves una estrella fugaz.

Como se asocia con la buena suerte, ya que son ángeles que pasan, pedir un deseo siempre se va a cumplir. Realmente cuando pides un deseo a una estrella, vienes a verla quizás  un millón de años tarde, ya esa estrella está muerta, o si se trata de un meteorito, se consume en llamas enseguida.

Dejar la ropa al revés.

Si te quitas la ropa y la dejas al revés, eso implica que todo te salga mal. No se me olvida que una tía mía, jugadora consuetudinaria a la “bolita”, que dedicaba entre 5 y 20 centavos a ese juego, un día se puso el vestido al revés y regresó con la noticia de que había adivinado el “parlé”  (juego de dos números juntos en llave, que si salen los dos números en el tiro que hayas jugado te pagan 900 veces lo que hayas jugado).   

Tijera encima de la cama.

Si dejas una tijera encima de la cama, eso rompe tus planes y genera discusiones. También es malo poner dinero o sombreros encima de la cama.

En silencio ha tenido que ser.

Los cubanos temen hablar por muchas razones, entre ellas prima la política y la falta de libertad de expresión, pero también porque piensan que el hacer las cosas de forma callada, evita que se malogren.  Esto puede aplicarse, al trabajo, al amor, a cualquier negocio o proyecto o viajes al extranjero.

Ello tiene su génesis en una popular serie televisiva, de igual nombre y que se refería a una carta de José Martí a su amigo Manuel Mercado, en la que proclama: “En silencio ha tenido que ser, porque hay cosas que para lograrlas han de andar ocultas…”

Aunque esta frase contemporáneamente se asocia al sistema de control y delación que impera en Cuba y de represión por parte del Ministerio del Interior, lo que quiere decir que todo hay que hacerlo en silencio.

Se te atraviesa un gato negro

Si se cruzó un gato negro en tu camino es que todas las calamidades te acechan, esto así se valora desde la edad media, cuando se los asoció con las brujas y la magia negra. Sin embargo, en tiempos remotos, que un gato se cruzase en el camino era señal de buena suerte, en el antiguo Egipto eran adorados, considerados sagrados y cuando morían se depilaban las cejas en señal de duelo y la pena por matar a un gato era la muerte. Los galos y los celtas también penaban el hecho de dar muerte a un gato, aunque no tan severamente.

Barrer los pies de una mujer soltera

Se dice que si se barren los pies a una mujer soltera, nunca que casará.

Mariposas “brujas”.

Una mariposa negra de gran tamaño, conocida como Tatagua, son presagio de mal agüero y de visitas indeseables. La última vez que vi una fue el día antes de que mi hijo Alexander viajara  a Cuba después de casi 10 años sin hacerlo.

Contar los sueños.

Si has tenido un sueño inquietante, debes contarlo antes del mediodía para que no se cumpla. Si deseas que se cumpla entonces lo contarás después del mediodía. Si eres, como mi nuera, de la que dicen que “nunca ve a la Virgen”, la que pasa al mediodía, entonces estás en peligro mortal porque te despiertas después de esa hora.

Paraguas abierto.

Nunca se puede abrir un paraguas dentro de la casa. El hecho de abrir un paraguas en un lugar interior se ha vinculado directamente con una desgracia venidera. Muchas de estas personas supersticiosas aseguran el poder maléfico de este acto, pero la gran mayoría no saben explicar el verdadero origen de esta creencia.

En los tiempos en que se inventó este artículo muchas personas, antes de salir de su casa abrían el paraguas y así accedían a la calle sin tener que mojarse e incluso lo hacían a la inversa, accediendo a la vivienda con él aún abierto. Esto ocasionó muchos accidentes domésticos, sacando más de un ojo y provocando múltiples lesiones, lo que llevó rápidamente a la creencia que dice que el abrir un paraguas en un interior trae mala suerte.

Entonces es preferible salir a la calle y mojarte en lo que abres el paraguas y después al regresar mojarte también porque tienes que cerrarlo antes de entrar. En ambos casos puede ser que seas premiado con un resfriado.

Contar dinero en la cama.

Si haces esto, el dinero se duerme y te deja de entrar, pero lo real es que el dinero es una fuente de enfermedades que pasa por muchas manos y que puede constituirse en un contagio para los que allí se acuesten. Esta última es la única razón lógica de esta superstición.

Pestaña

Cuando se te cae una pestaña, pide rápido un deseo, de esta manera evitarás que el diablo se la quede y la coleccione.  Yo lo he hecho muchas veces y nada de lo que he pedido se ha cumplido.

Pie izquierdo.

“Será que hoy

con el pie izquierdo fue que yo me levante

tire el café

y a media calle fue que yo me resbale.

Una estación equivocada, una camisa mal planchada

y hasta una cita cancelada por error.

No había luz en la oficina, ni semáforo en la esquina,

mala suerte el pie izquierdo me acabo.

Será que hoy

el cielo con smog a las espaldas me cayó

tome el reloj y al escaparse de mis manos

simplemente se rompió

Será que hoy amanecí con el espíritu caído

el biorritmo destruido en este andar

o a lo mejor es que hasta hoy

nunca me habías hecho tanta falta como hoy.”

Armando Manzanero con su estupenda “Será que hoy” nos muestra las consecuencias de salir con el pie izquierdo, que implica que si empezamos el día, emprendemos un proyecto y lo comenzamos dando el primer paso con el pie izquierdo, a todo lo rodeará la mala suerte y nada saldrá como queremos.  

El huesito del pollo.

El hueso en forma de horqueta del pecho de las aves, es mágico y por lo tanto se dejaba secar al sol y luego, al hacer la correspondiente pregunta, uno de los dos que lo sostenían, tiraban cada uno de los brazos de la horqueta y el que quedaba con la parte mayor era el afortunado.

Viernes Santo.

No barrer ni limpiar ese día porque es barrer a Cristo y la casa se llenará de hormigas.

Aunque en ninguna parte de la Biblia dice que no se pueda comer carne, los cristianos la evitan este día y muchos toda la semana como manifestación de luto y penitencia.  Como la carne es un alimento cotidiano en muchas partes, a lo mejor tiene un componente comercial, para que la gente consuma más pescado y mariscos, lo que no hacen habitualmente.

Vuelta a la manzana el 31 de diciembre.

Junto con echar un cubo de agua para que se vaya todo lo malo, es una de las tradiciones más corrientes de todo cubano. A eso hay que sumarle que la vuelta a la manzana es con una maleta, para que nos de suerte para viajes y aventuras. Y si echamos dinero dentro de la maleta, pues tendremos más prosperidad en el nuevo año (si no te roban la maleta y el dinero en ese momento).

Bebé con hipo

Cuando los bebés tienen hipo, es costumbre ponerles un hilito rojo en la frente, con saliva. No sé a qué se refiere pero es muy usual hacerlo y a veces se les va el hipo y otras no.

Causas del Orzuelo.

Si le niegas a una embarazada un deseo, te saldrá un orzuelo como castigo. Hay que ver cuál es la causa si no tienes ninguna embarazada cercana y te sale el orzuelo de todas maneras.

Tocar un chipojo.

Tocar una lagartija o caguayo, conocido en Cuba como chipojo, te dará fiebre.  Yo me hubiera pasado toda mi niñez con fiebre porque me encantaba coger lagartijas y colgarla de las orejas mientras me la mordían.

Vaso de agua.

En el Caribe la gente precavida pone en su dormitorio un vaso de agua limpia para impedir los malos augurios; igual ocurre en lugares de culturas muy diferentes como las ciudades de Uzbekistán, los países escandinavos y Sicilia.  La santería cubana y el espiritismo se quieren atribuir su paternidad y ya ven como está extendida por todo el mundo.

Billete de 2 dólares

El billete de 2 dólares de Estados Unidos, es sin dudas el billete menos conocido de éste país.

La casi nula presencia del billete de 2 dólares, ha originado un desconocimiento general de su existencia y ha suscitado incluso toda una serie de mitos urbanos y creencias populares a su alrededor. No es raro escuchar o leer a quienes afirman que tener un billete de 2 dólares atrae a la buena suerte. Yo lo tengo  y no me quejo de mi suerte, pero antes tampoco lo tenía y también tenía muy buena suerte.

El primer trago de ron.

Cuando se abre una botella de ron, lo primero que se hace es echar unas gotas en el piso de la casa o en la tierra, para que los santos te bendigan. Otros dicen que es un saludo a los muertos, pero lo cierto es que en Cuba casi todo el mundo, aunque no crea en nada, lo hace.

Encender tres cigarrillos con la misma llama.

En una guerra de las tantas del siglo XX se creó el mito de que una noche tres soldados encendieron sus cigarrillos con el mismo fósforo, alertando con esto al enemigo, el cual vio la llama del primero apuntó al segundo y al disparar mató al tercero, por lo tanto se cree que al hacer esto uno de los fumadores estará cerca de la muerte.

Pisar mierda trae buena suerte

Hay quien dice que sí, que es suerte para el que viene detrás tuyo que no tiene que esquivar el mojón. Otros dicen que mala suerte sería si la mierda lo pisara a uno. Y hay otros que dicen que viven pisando mierda y no tienen ninguna suerte. En mi criterio es comparable a la frase “De todo lo malo, sacas algo bueno”, por lo que se puede considerar una frase consolatoria.  La buena suerte no se “encuentra”, uno mismo la lucha para que llegue a nosotros.  En el caso que sea un ave el que con tan buena puntería, defeque encima de nosotros, entonces hay que referirse al refrán: Estar cagado de aura = tener mala suerte.  Sin embargo, da buena suerte recibir el impacto, normalmente en la cabeza o en los hombros, de los detritus de una paloma.  Cuentan que tras la muerte del Papa Antero, martirizado por el emperador Romano Maximino Tracio, perseguidor de los cristianos, los fieles se reunieron para elegir al nuevo Papa. El campesino Fabián que por allí pasaba, se acercó y una paloma se cagó encima de él. Los cristianos dijeron que la paloma era el Espíritu Santo y eligieron a Fabián como sacerdote, obispo y Papa. El colmo de las supersticiones.

Picazón.

Si sientes picazón insistente en los oídos, es que están hablando mal de tí.

Picazón en la palma de la mano.

Cuando a una persona le pica la mano derecha es porque pronto se tendrán noticias de un dinero que va a llegar o algo bueno para la economía. En cambio si la comezón se da en la mano izquierda es porque tendrás un gasto muy fuerte o se aproxima un pago que debes hacer.

Y al igual que en muchos países, tirar sal, romper un espejo y muchísimas otras cosas son de mala suerte.

Pero hay cosas muy puntuales, recordemos a Orlando “el Duque” Hernández, uno de los mejores pitchers del béisbol cubano y triunfador en Grandes Ligas, que nunca pisaba la raya de cal del terreno durante un juego, daba un brinco y saltaba, pero nunca la pisó.  Parece que le trajo buena suerte porque su carrera fue muy exitosa.
Los amuletos de la suerte para un cubano.

Y si el cubano tiene tantas supersticiones, tiene que haber en consecuencia, objetos que ayuden a evitar males.

Al igual que en todas las culturas, el cubano busca protección  de todo tipo para ellos y sus allegados. Esto lo hacen por cualquier vía, incluyendo, por supuesto, talismanes, amuletos o resguardos que puedan ampararlo del mal.

Esto comienza desde que el bebé llega a la vida. Ahí son imprescindibles los Ojos de Santa Lucía y el Azabache, los que evitan el mal de ojo a los recién nacidos y niños pequeños y también se usan por las mujeres hermosas como resguardo.

Y quien no se acuerda de esta canción (de los que tengan unos cuantos años como yo, por supuesto);

“Nunca se supo quien fue su madre,

porque la ingrata lo abandonó

una viejita lo vio en la calle

y con cariño lo recogió.

Tan solamente un escapulario

lleva el chavea por capital

Colgao al cuello como un sudario

Para guardarlo de todo mal.

Y expirando la viejita

a su niño lo abrazó

y besando sus manitas

al oído le cantó.

Quiero que mi escapulario

nunca se aparte de ti,

guárdalo como un sudario

que yo te entrego al morir.

Reza por mi tós los días

a la virgen del Rosario

sólo te quiso en la vida

sólo te quiso en la vida

quien te dio el escapulario. “

El escapulario, de autor anónimo y hecha famosa por Pedrito Rico, “El Ángel de España”, tan popular en Cuba y en otros países, nos muestra la fuerza de tener un escapulario que te proteja, aunque al final a su poseedor lo mata un toro, pues era torero, así que no le sirvió de mucho, o como dicen en México, le valió madre el dichoso escapulario.

El guano bendito, del Domingo de Ramos, se sitúa en forma de cruz detrás de la puerta, al igual que una herradura, para atraer la prosperidad y evitar enfermedades.

Nunca puede faltar un elefante en la sala de la casa. A pesar de que en Cuba no hay elefantes, el poner un elefante de espaldas a la puerta, sin duda debe traer dinero al hogar.

El Sagrado Corazón de Jesús

La imagen del Sagrado Corazón de Jesús en las salas de casi todos los hogares cubanos, forma parte de la cultura hogareña cubana.  A partir de la revolución y de forma paulatina, esta imagen comenzó a desaparecer de la sala, o a emigrar a alguno de los dormitorios, o para detrás del escaparate o como lo tenía mi suegro, debajo del espejo de la puerta del escaparate. Unos lo hicieron por dejación de su fe católica otros por ocultamiento de ésta.

Un Buda en la casa.

Seguramente más de una vez lo has visto y te ha sacado una sonrisa, con su gran barriga y su alegre semblante. Los chinos adoran al Buda feliz, al que muchos consideran como un símbolo de felicidad, buena suerte, plenitud, prosperidad y riqueza. Lo cierto es que esta costumbre tan arraigada en Asia, también es muy corriente en Cuba.

Una cinta roja en la ropa o en el auto, protege de las malas vistas e influencias negativas. Los creyentes de la santería además emplean una cruz de cascarilla (polvo de cáscara de huevo pulverizado) en varias partes del cuerpo, para su protección.  Y no hablar de los cientos de amuletos que puede hacer un santero para protegerte, que no son más que cosas asquerosas mezcladas y que al final tienen un sólo objetivo, que es tumbarte la plata y hacerte hacer papel de guanajo (tonto).

Algunas supersticiones mexicanas.

Aunque muchas son similares a las cubanas por nuestra común ascendencia, aquí van algunas interesantes.

El canto de los gallos a la medianoche o el ladrido intenso de los perros a la misma hora, significa que la muerte anda paseando por ahí.

Cerca de la entrada de la casa, se suele colocar una maceta de sábila con un listón rojo, para proteger y bendecir el hogar.

Las gallinas tienen la capacidad de cantar como un gallo como símbolo de un mal augurio.

Si se caen unas tijeras abiertas y apuntan a alguien, esa persona será víctima de una desgracia, frecuentemente relacionadas con la infidelidad.

Apagar todas las velitas de tu pastel de cumpleaños de un solo soplido, te traerá buena suerte durante el año, si es que llegas al otro.

Suele decirse “Jesús” o “salud” después de un estornudo para que el demonio no le entre por la boca al afectado.

Poner la cama con los pies hacia la puerta en una habitación, por el dicho “los muertos salen siempre de la casa con los pies por delante.” Con lo pequeñas que hacen las casas y en particular los cuartos, salvo mansiones de gente rica, en México, es imposible situar la cama de otra forma que no sea con los pies hacia la puerta.

Cuando te cambias de casa, no debes llevar una escoba usada, porque atraerá las cosas malas que hayas dejado en la casa anterior. ¿Y si en la casa anterior te fué muy bien entonces hay que llevarse la escoba?

Si te zumban los oídos, alguien te está criticando, pellizcate el oído derecho y quien habla mal de ti se morderá la lengua.  Creo que el único pellizcado vas a ser tú.

El silbato del afilador es siempre una mala señal. (Si fuera en Cuba tendría sentido, porque los afiladores ambulantes son, en su mayoría, agentes de la Seguridad del Estado).

Soñar con una boda.  Cuenta la leyenda que soñar con una boda es realmente un augurio de muerte, mientras que soñar con un funeral conducirá inequívocamente a un casorio.

Las lentejas y el dinero.  Aunque son una excelente fuente de hierro, este no es el motivo por el cual en México se comen lentejas para Año Nuevo, ¡sino porque atraen el dinero! No importa que no te gusten, cada 31 de diciembre debes sentarte con tu plato lleno de prosperidad económica y comértelo.

Poner a San Antonio de cabeza.  Las jovencitas mexicanas se encomiendan a San Antonio para así puedan conseguir pareja para la fiesta de sus quince.

Sea cual sea tu posición en el ocultismo, sus orígenes son fascinantes, aquí están algunas de las creencias más extrañas alrededor del mundo.

Algunas supersticiones raras en otros países del mundo son estas.

Manténgase siempre joven. En la antigua Bretaña las mujeres llevaban bellotas en sus bolsillos para lucir siempre jóvenes. Se creía que el árbol del roble proporcionaba la longevidad y protección contra enfermedades debido a su larga vida.

No coma lechuga si quiere tener hijos  En el siglo 19, los hombres ingleses evitaban comer ensaladas si querían formar una familia. Se sugiere que la lechuga era perjudicial para procrear porque era una planta “estéril” y suponían que podía afectar también al hombre. Ahora hay teorías de que los alcaloides que contiene esta planta son afrodisíacos.

No mastique chicle en la noche.  En Turquía es mejor utilizar enjuague bucal., ya que los turcos tienen la creencia que si usted está masticando chicle en la noche en Turquía, en realidad está masticando la carne de los muertos.

Nunca des guantes como un regalo.

Bueno, puedes regalar guantes, pero también tienes que recibir algo a cambio, o ambos tendrán mala suerte. Esta serie de supersticiones que se remonta a la época medieval y a los días de la caballería, cuando los caballeros llevaban uno de dama en sus cascos,  derivado de la costumbre de una dama dejar caer un guante con la esperanza de que un futuro amante lo recogiera.

Si vas a una reunión importante, estáte atento a una cabra.  La cabra ha sido asociada con el libertinaje, la lujuria y al diablo desde hace miles de años. También se cree que absorben cualquier mal o perjuicio que pudieran cruzarse en su camino, es por eso que una vez fue considerado de buena suerte encontrar una cabra al viajar a una reunión importante.

Un silencio incómodo significa que está pasando un ángel.  Esta explicación es  bastante caprichosa para cuando se hace una pausa en la conversación  y nadie habla.

Ir al hospital el miércoles.  De acuerdo a la Enciclopedia de las supersticiones, un cuento de viejas dice que el mejor día para ir al hospital es un miércoles. El lunes es el mejor día para salir y el sábado es el peor, ya que significa que volverás pronto.

Pasar un bebé recién nacido a través de una corteza de queso.  En la Inglaterra medieval, las mujeres embarazadas realizaban un queso llamado “Groaning Cheese”, una gran rueda de queso que maduraban durante nueve meses, mientras el bebé también crecía. Cuando llegaba el momento del parto, el queso se repartía entre la familia y cuando no quedaba nada más que la corteza externa, pasaban al bebé sobre la corteza del queso en el día del bautizo, para ser bendecido con una larga y próspera vida.

En Cuba existe algo parecido que es la fabricación y enterramiento de un botellón durante 9 meses hasta el parto. El “Aliñao”, licor fuerte y dulce se reparte entre vecinos y familiares y la recién parida debe tomar en cantidades importantes para  transmitirlo al niño en su leche. Si el bebé es una niña, usualmente se guarda una botella de la bebida para cuando la recién nacida cumpla 15 años. Ese día, se hará otro brindis con el trago añejado durante todo ese tiempo.

Guarde los dedos pulgares si camina en un cementerio.  En Japón, si camina por un cementerio, tiene que meter los pulgares en su pantalón para proteger a sus padres. Esto se debe a que la palabra japonesa para el pulgar se traduce literalmente como “padre-dedo”, y al ocultarlo está protegiendo a sus padres de la muerte

Si un ave defeca en su casa, usted será rico.  En Rusia, si un ave defeca sobre usted, su coche o su casa es signo de buena suerte, y puede traerle riqueza. Aquí donde vivo en México, y que abundan las aves, en particular las golondrinas, ya yo me hubiera hecho millonario de tantas cagadas de pájaros.

Trébol de cuatro hojas.   Cualquiera encuentra un trébol de tres, pero uno de cuatro hojas es solamente para quien tiene suerte. Cada hoja representa uno de los cuatro componentes básicos de la felicidad, pero en este punto existen diferentes concepciones. Para unos los cuatro símbolos que representan son: riqueza, fama, amor y salud. Para otros los cuatro símbolos que representan son: esperanza, fe, amor y suerte.

Lluvia en el día de tu boda

En algunas culturas, la lluvia en el día de boda simboliza fertilidad y purificación. El día de mi boda, 11 de enero de 1969, llovió abundantemente por la entrada de un frente frío.  Vamos a cumplir 49 años de matrimonio próximamente.

Viernes 13 o martes 13

El martes es el tercer día de la semana  y está consagrado al planeta y a Marte, dios romano de la Guerra, del que tomó el nombre y con cuya figura le representan.

Este día fue considerado entre los egipcios como día de muy mal agüero, porque decían era el del nacimiento de Tifón, uno de los gigantes que se atrevieron a escalar el cielo. En la mitología griega, Tifón, era un monstruo terrorífico, resultante de una unión entre Gaia (madre tierra) y Tártaro, y es identificado con el dios egipcio Seth, divinidad patrona de las tormentas y la guerra.

Es decir que todo lo que se asocia al martes es nefasto.

Y si asociamos a martes con el número trece, entonces la cosa empeora.

Desde la antigüedad el trece fue considerado como de mal augurio ya que en la Última Cena de Jesucristo había doce apóstoles y Jesús. Se considera a Judas Iscariote, el traidor como el número 13.

Y está la Cábala. Cuando hablemos de la Cábala hay que hablar de la  la Kábala Judía porque el pueblo de Israel ha mantenido la tradición y los conocimientos intactos por tradición.  La palabra más comúnmente usada para refe­rirse a la mística es la Cábala.

Originalmente se refirió a todo el caudal de saber popular tradicional, más tarde, se la usaba para referirse a los secretos de la Torá, las cosas ocultas del Creador que fueron transmitidas de generación en generación.  La Torá que en hebreo significa instrucción, enseñanza, es el texto que contiene la ley y el patrimonio identitario del pueblo israelita y constituye la base y el fundamento del judaísmo.

La Cábala enumera a 13 espíritus malignos, al igual que las leyendas nórdicas; en el Apocalipsis, su capítulo 13 corresponde al anticristo y a la bestia. Una leyenda escandinava cuenta que en una cena de dioses en el Valhalla, Loki, el espíritu del mal, era el 13° invitado. En el Tarot, este número hace referencia a la muerte. Y trece es el número que las brujas de la edad media esperaban para hacer sus pócimas.

En el Tarot, este número hace referencia a la muerte y a la desgracia eterna y para otra vida. El tarot es un instrumento utilizado para predecir el futuro que no ha dejado de embaucar a ignorantes e ingenuos durante siglos. El tarot es una baraja de naipes a menudo utilizada como medio de consulta e interpretación de hechos (presentes, pasados o futuros), sueños, percepciones o estados emocionales que constituye, además, un tipo especial de cartomancia.

Al trece en el Tarot, se la llama El Arcano XIII y su carta no lleva más que el número, no va escrita la palabra muerte, simplemente para no nombrar ni ver la palabra muerte. Viene representada por un esqueleto, que lleva una guadaña en la mano izquierda (siniestra) con la que va cortando cabezas y hierbas.

En las culturas de España, Grecia y en la mayoría de los países de América Latina, como Cuba, Uruguay, Argentina, Chile, Perú, Venezuela, México  y Colombia, se considera el martes 13 un día de mala suerte.

En España existe un antiguo refrán que ilustra en parte la superstición: “En martes 13, ni te cases, ni te embarques, ni de tu casa te apartes”.  Otros dichos menos conocidos dicen: el martes ni gallina eches, ni hija cases. El martes ni hijo cases, ni cochino mates. En martes ni tela urdas, ni hija casas, ni las lleves a confesar porque no dirán la verdad. El martes ni tu casa mudes, ni tu hija cases, ni tu ropa tajes.

Hay mucha gente con fobia a este día, que no viaja a ningún lado por superstición.

Las connotaciones negativas que se le dan al martes 13 no tienen fundamentos científicos, por lo cual se debe tener muy claro que sólo se trata de un mito.

Incluso hay mucha gente que lo ha tomado al revés, por lo cual dentro de sus creencias, lo consideran como un día de buena suerte. Tanto así, que durante ese día muchos apuestan por ese número en los juegos de azar.

Y en las culturas anglosajonas ocurre exactamente lo mismo, pero respecto al viernes 13.

La palabra Friday, (viernes  en inglés, procede del nombre de la diosa vikinga Frigga.  Frigg es una de las diosas mayores en la mitología nórdica y germánica, esposa de Odín, diosa del cielo, la fertilidad, el amor, el manejo del hogar, el matrimonio, la maternidad y las artes domésticas.  Tiene el poder de la profecía aunque nunca relata lo que sabe,es la única que junto a Odín tiene permitido sentarse en el trono y observar los nueve mundos.

El viernes, en el mundo cristiano, ha sido considerado históricamente como un día de luto, pues fue en ese día de la semana en que fue crucificado Jesús de Nazareth.

Y los creyentes en esa especie de maldición dicen que en viernes trece ocurren hechos funestos,  haciéndose referencia a hechos históricos como el viernes 13 de octubre de 1307, cuando la Orden de los Caballeros Templarios fue perseguida por la Santa Inquisición y gran parte de ellos fueron arrestados en toda Europa, juzgados y condenados por supuestos crímenes en contra de la cristiandad; el viernes 13 de diciembre de 1939, en Victoria tuvo lugar el llamado “Viernes Negro”, considerado como uno de los peores incendios forestales en la historia de la humanidad y el más grave en Australia; el viernes 13 de octubre de 1972, el vuelo 517 de la Fuerza Aérea Uruguaya se estrelló en los Andes con 40 pasajeros y 5 tripulantes, entre quienes se encontraban integrantes equipo de rugby Old Christians, siendo rescatados 16 de ellos 72 días después, lo que es conocido popularmente como “El Milagro de los Andes”; el viernes 13 de enero de 2012, 32 personas murieron y casi 4.200 evacuados cuando el crucero Costa Concordia chocó contra las rocas de la Isla Giglio y naufragó;  los mexicas se rindieron a Hernán Cortés el viernes 13 de agosto de 1521, poniendo fin al imperio Azteca; el viernes 13 de septiembre de 1940, en el marco de la Segunda Guerra Mundial, la moral británica sufrió un duro golpe cuando los bombarderos alemanes destruyeron la capilla del Palacio de Buckingham; el Viernes 13 de octubre de 1972, un avión de la aerolínea soviética Aeroflot se estrellaba al intentar aterrizar en Krasnaya Polyana, donde murieron 174 personas y se convirtió en el peor accidente aéreo hasta esa fecha; en Nueva York, un famoso hotel sufrió un incendio que acabó con todo el piso 13 costando la vida de dos familias enteras que juntas hacían un total de 13 miembros, lo que hizo que el hotel cerrara ese piso por el resto de sus días; en un hospital de Alemania, el piso 13 trataba a pacientes con quemaduras graves, un día cualquiera, un hombre que era tratado por quemaduras en un brazo, saltó sin razón alguna por la ventana del edificio, la habitación de la cual cometió suicidio fue la número 13 del piso 13.

Y así pudiéramos estar enumerando cientos de desastres, pero si tomamos otra fecha también ocurriría lo mismo o peor, por lo que eso no tiene ninguna explicación científica.

La unión del viernes y el 13 se popularizó como consecuencia de la serie de películas de terror “Viernes 13” en las que Jason, el villano asesino nunca muere.  Viernes 13 es una de las franquicias más longevas, la serie clásica empezó en 1980 y cuenta con 12 películas,  y otra que se estrenará este año.  Jason Voorhees es ahogado en lago cuando tenía 9 años y cada viernes 13 viene a vengarse.

Supersticiones de los musulmanes

Preguntar si puede existir un pueblo que esté libre de todos los prejuicios supersticiosos, es lo mismo que preguntar si puede existir un pueblo donde todos son filósofos.

Hay que recordar que gran parte de los conocimientos científicos de la Edad Media proceden de los musulmanes, pero el fanatismo de su religión sepultó estos conocimientos volviendo al cultivo de lo místico y supersticioso.

Las historias de genios, lámparas mágicas, alfombras voladoras y deseos contenidos en cuentos como los de Las mil y una noches y otras obras se han transmitido por generaciones. La mitología islámica probablemente se ha visto influenciada por la Mitología arábica. Las dos se diferencian en que la del islam prohíbe la brujería.

La religión llamada islam, contiene muchas fábulas y mitos que los musulmanes llevan a diario como ritual y parte de su actuar personal, a pesar de que los musulmanes acusan de este defecto a todas las sociedades cristianas, y éstas los acusan a ellos.

– no comen con la mano izquierda por qué satanás según Muhammad/Mahoma come con esa mano (Otros dicen que es porque la mano izquierda es la mano impura, la mano con la que se lavan tras hacer sus necesidades, mientras que la mano derecha es la que utilizan para comer.

– si rezas y miras al cielo, podrías perder  la vista por no rezar con la cara mirando al suelo

– el concepto del mal de ojo es considerado por algunos que se menciona en el Corán, en Surat al-Falaq (en el cual se dice que uno busque refugio “de la diablura del envidioso mientras tiene envidia”, y se mantiene como cierto entre millones de musulmanes. La Mano de Fátima se usa a veces para neutralizar el efecto del mal de ojo, y es el antecedente del azabache y los ojitos de Santa Lucía.

Los discípulos del Corán no pueden comer cerdo y tomar licores alcohólicos, aunque los grandes magnates de los ricos países petroleros han buscado excepciones como el champán y el ajenjo. Y para qué hablar de la obligatoriedad de la cantidad de rezos diarios y su ritual, la peregrinación a la Meca al menos una vez en la vida, la preparación para ello dejándose el pelo largo y quitarse los pelos de la axila con pomada arsenical, requisitos de vestimenta y muchas otras regulaciones dogmáticas.

Obsesión por números de la suerte,

Las supersticiones numéricas están entre las más antiguas del mundo. Ya vimos la superstición relacionada con el martes y el viernes 13, ahora revisemos otras:

-estoy esperando el ascensor, y digo, si llega antes de que yo cuente 5, significa que voy a tener suerte, si no, es que no.

-Si revuelvo el café una determinada cantidad de veces cada vez que lo voy a tomar, voy a tener un día sin problemas.

Hay quien acostumbra recitar el alfabeto durante el lapso que el azúcar tarda en caer desde la espuma hasta el fondo del café capuchino. Se supone que la letra que coincida con el momento en que se precipite es la primera letra del nombre de la persona que está pensando en ti.

Hitler simpatizaba con el número siete (supersticiosamente planeó sus batallas mili­tares más importantes el día siete de cada mes) y había diseñado la esvástica nazi pensando en el antiguo símbolo que, entre otras cosas, representaba la rueda de la vida.

-Recuerdo que el gran hotel Moskva, frente a la Plaza Roja, en plena ortodoxia comunista en la Unión Soviética, no tenía de piso 13, se pasaba del 12 al 14.  Pero no es un caso único, un vocero del fabricante de ascensores Otis International estimó en una ocasión que el 85% de los edificios de los Estados Unidos de más de 13 pisos evitaban el número de la mala suerte, o sea, pasaban del 12 al 14.

Y uno de los más comunes en Cuba: la charada

Sin embargo, en Cuba la charada, que es un juego de azar con una tabla compuesta de 100 números consecutivos del 1 al 100, los primeros 36 números están tomados de la llamada charada china o chifá, los restantes son producto de la imaginación popular, ya que representan distintas entidades, desde animales hasta objetos, con los que se juega en la bolita, especie de lotería basada en apuestas hechas a estos números, sobre la base de sueños o vivencias relacionadas con lo que indica cada uno.

Es significativo que el número 13 se asocia con: Chulo, Pavo Real , Niño grande, Anafe (horno portátil) en lo cual no hay nada tenebroso.

Y no hablemos del juego llamado lotería, la lotería por billetes que hay en tantos países y los cientos de juegos de azar basados en probabilidades, estudiado su comportamiento mediante modelos económico-matemáticos y que le dan la suerte a uno entre millones, por puro azar.

Son millones en el mundo los que padecen de una inclinación patológica ante los juegos de azar y en presencia de una ruleta, máquinas tragamonedas, dados, cartas o lo que aparezca se juegan lo que no tienen y pierden hasta la vergüenza.  Y a veces hasta la vida por no poder pagar estas deudas. O recurren a la estafa el robo y el engaño a familiares y amigos, todo para continuar con su ludopatía.  Crean enfermedades, situaciones críticas falsas o simplemente sin ningún remordimiento le roban a hermanos, padres o hijos.  Es una adicción tan dañina como la drogadicción.

Puedes repasar tu vida y ver cuán en serio tomaste estas advertencias, o calcular cuántas veces en tu vida un martes 13 fue especialmente malo o, por el contrario, sorpresivamente bueno. Desgracias ocurren todos los días, no solo los martes o los viernes 13.  Y cosas buenas también.

Tan famosos y supersticiosos

El trastorno obsesivo-compulsivo es una enfermedad bastante común, por eso, numerosos personajes trascendentes la padecen. Muchos famosos pertenecen al 3 % de la población mundial que padece de ello  y que se traduce, desde una extrema meticulosidad con conductas repetitivas hasta miedos exagerados, y temores infundados y que las personas reconocen lo absurdo de los mismos.

Desde actores, escritores, científicos y políticos, en quienes se ha especulado que son o han sido portadores de estos trastornos, sin embargo, no les ha impedido tener gran éxito profesional.  A pesar de que llevaron sus creencias a niveles ridículos.

Por supuesto que no voy a referirme a la multitud de pseudoartistas o pseudointelectuales,  que son desgraciadamente los más populares, y también los más incultos e ignorantes, sino a verdaderas personalidades que han sido proclives a supersticiones o conductas obsesivas.

Un de ellos ha sido Albert Einstein (1879-1955), físico y autor de la teoría de la relatividad, personaje histórico que  padecía de dislexia, repetía frases compulsivamente.

Nikola Tesla (10 de julio de 1856-7 de enero de 1943), ingeniero eléctrico e inventor del motor de inducción, sistemas de comunicación inalámbrica y osciladores de radiofrecuencia, en resumen,  sin sus descubrimientos no existiría el mundo moderno, estaba obsesionado por el número tres: caminaba alrededor de un edificio tres veces antes de entrar; pedía tres servilletas; se hospedaba en cuartos con el número 3, y vivió los últimos días de su vida en el piso 33 de un hotel de Nueva York.

Woody Allen: Al director le afectan rituales de limpieza, orden y simetría.  Pero dicen que se lleva el Óscar al más maniático porque duerme siempre con los zapatos puestos por miedo a la muerte o a tener algún accidente, se toma la temperatura corporal cada dos horas y procura viajar siempre en avión privado por miedo a los gérmenes y aún así, lleva siempre mascarilla.

Y hablando de cine, Mejor… imposible (en inglés: ( As Good as It Gets) es una película norteamericana, una comedia romántica, dirigida por James L. Brooks protagonizada por Jack Nicholson, Helen Hunt y Greg Kinnear.  Melvin Udall, el personaje que interpreta Jack Nicholson, es un famoso escritor de novelas románticas que vive en Nueva York en un lujoso edificio de departamentos en Manhattan y padece un trastorno obsesivo-compulsivo, lleva siempre un juego de cubiertos desechables para no usar los mismos que han utilizado otras personas por su trastorno, usa los jabones una sola vez y los desecha y repele el contacto humano.   Pero lo interesante es que Jack Nicholson nunca hace filmaciones si juega su equipo de baloncesto. Más que una superstición es una forma segura de no perderse un solo partido de los Angeles Lakers.

El almirante Lord Nelson supersticiosamente mandó clavar una herradura de caballo en el palo mayor de su nave. El presidente Harry S. Truman tenía colgada una herradura de caballo en la puerta de su despacho de la Casa Blanca.

Charles Chaplin: el famoso actor, humorista, compositor, productor, director y escritor británico,  estaba aparentemente atormentado por el orden y la limpieza.

Leonardo DiCaprio, el aclamado actor ganador los premios “Oscar” y ganador de “Globos de Oro” obsesivo tendría problemas al caminar y transitar por ciertos lugares de la acera, como así también, al ingresar a lugares en las que sus puertas tuvieran determinadas características, y tiene obsesión por la limpieza extrema y sobre todo su terrible aversión hacia los gérmenes.

Michelangelo Buonarroti pintor, escultor y arquitecto del renacimiento. Es considerado, junto con Leonardo da Vinci,  arquetipo del renacimiento. Sus esculturas más conocidas son la Piedad y el David, junto con la capilla Sixtina del Vaticano. Se decía en su biografía que dormía vestido con sus botas por miedo a contaminarse, y que le ocasionaba muchos problemas, en ocasiones, el estar con otras personas, por el temor a que lo tocaran y por ende lo contaminaran.

Si Thomas Alba Edison no hubiese sido obsesivo compulsivo y no hubiera intentado más de mil veces el experimento de la bombilla eléctrica, hoy seguiríamos a oscuras.

Bela Lugosi, el famoso actor de procedencia rumana, sumamente reconocido por caracterizar al personaje del Conde Drácula en varias producciones de Broadway, entre ellas Drácula de 1927, y que lo llevó a la pantalla grande en la película Drácula de 1931, erigiéndose en  La leyenda del terror,  nos abandonó interpretando también en la muerte a su personaje más querido y que más satisfacciones le dio en vida, el Conde Drácula.  Lugosi fue enterrado llevando puesto su disfraz del conde vampiro, en el Holy Cross Cemetery de Culver City, California, no a petición propia como dice la leyenda urbana, sino de su hijo George y su madre Lillian Arch que consideraron que él lo habría querido así.

María Félix, la famosa diva mexicana fue enterrada con algunos objetos de santería,  ya que era devota y supersticiosa del tema y se busco una protección post-mortem bastante primitiva y dudosa.

Juanes es un supersticioso de primera. El artista colombiano da un rodeo tremendo para no tener que pasar bajo unas escaleras, se echa sal en su hombro izquierdo con la mano derecha y si la tira, accidentalmente, y se levanta con el pie derecho para atraer la buena suerte.

Indira Gandhi, cuando fue Primera Ministra de la India, no tomaba decisiones importantes sin antes consultar a un gurú personal, el que no pudo visualizar  el asesinato de Indira Gandhi el 31 de octubre de 1984, a manos de sus guardaespaldas.

Winston Churchill.  La superstición durante la Segunda Guerra Mundial no estaba sólo en un bando. El primer ministro de Inglaterra. Winston Churchill, portaba su “bastón de la buena suerte” y rara vez dejaba de acariciar a un gato negro que le saliera al paso. Pero quizás se destacaba entre todo por su tremenda aversión al número 13.

Wolfgang Amadeus Mozart, entre los compositores, ninguno ha sido más supersticioso que él.  Se dice que dudó en aceptar el encargo de escribir el Réquiem, pues temía que eso atrajera su propia muerte… Falleció poco después sin haber terminado la obra.

Napoleón Bonaparte, antes de emprender una campaña,  siempre pedía consejo a una famosa clarividente, Madame Normand.  Los historiadores dicen que el gran corso tomaba muy en cuenta los sueños que tenía, creyendo que éstos le predecían el futuro. Muchas veces expresó que las estrellas controlaban todos sus actos y que su buena estrella lo guiaba para lograr grandes victorias.  Napoleón atribuía gran importancia a pequeños incidentes, tales como una caída del caballo o el cruce repentino con un gato negro, que para él era un signo muy desafortunado. Se dice que soñó con un gato negro antes de la batalla de Waterloo, en la cual sufrió una aplastante derrota.

Isabel Preysler no sale de su casa sin dar siete vueltas a un anillo que siempre lleva consigo.   Luciano Pavarotti acostumbraba recoger los clavos doblados tras el montaje de los escenarios en los que debía actuar.  Benicio del Toro es una de las celebridades que toca madera, el actor tiene un anillo de ese material para tenerlo a la mano cada vez que lo necesite.

John Travolta nunca utiliza la misma camiseta durante un rodaje. Dice que le da mala suerte. Mientras filma llega a cambiarse de 8 a 10 veces de camiseta, la gran mayoría de la marca Armani.  En una ocasión leí que Travolta no toma absolutamente nada, ni agua, que no sea en copas de cristal.

Errol Flynn tenía aficiones mucho menos sanas que  consistían en ingerir vodka en los rodajes, con los consiguientes inconvenientes que ello conlleva y cuando se lo prohibieron, tuvo la genial ocurrencia de inyectar la bebida en las naranjas que comía durante los descansos. Antes de morir pidió ser enterrado junto a seis botellas de vodka… por si acaso lo podía hacer en el más allá.

Julia Roberts, que es una maniática del cuidado del cuerpo: solo bebe leche de soja y se baña en agua mineral. En cuanto a la comida, exige que provenga de agricultura biológica sin pesticidas u otros productos químicos tóxicos para el ambiente o para la salud de los que la comen.

El gran escritor mexicano Jorge Ibargüengoitia había tenido una premonición y lo había escrito. Su artículo “Botiquín de viaje” consiste en un estudio del llenado del botiquín y la relación que tiene con las creencias de quien lo efectúa. Textualmente dice, refiriéndose al suyo: “el contenido de la bolsita ha ido cambiando con el tiempo. El primer cambio ocurrió cuando me di cuenta de que la gasa y la tela adhesiva no me iban a servir de nada en caso de que se cayera el avión”.  El accidente aéreo en el que murió se produjo en Mejorada del Campo, Madrid, en un avión Boeing 747 de la aerolínea Avianca, Vuelo 11 de Avianca que cubría el trayecto Charles de Gaulle París – Aeropuerto de Madrid-Barajas Madrid.

La superstición es además  la enfermedad endémica de los escritores.

Flaubert escribía sólo en albornoz y pantuflas. Hemingway, sólo de pie y corregía sólo con lápices cuya punta hubiera afilado él mismo. Hubo quien escribió su vida en seis tomos sin levantarse de la cama.

Además de los que se acogen a los tópicos más habituales, están aquellos que crean sus propias supersticiones. Uno de los más destacados en este campo es Gabriel García Márquez. El escritor colombiano se niega a que le hagan una biografía porque lo considera una forma de invocar a la muerte.  Decía que su obra maestra, “Cien Años de Soledad”, era un vallenato de más de 400 páginas. El vallenato en su temática abarca hechos de la vida cotidiana, la amistad, la parranda, la tierra y el amo de la zona de Valledupar. De ahí salió el realismo mágico de García Márquez, al identificar y dar vida a las costumbres, mitos y supersticiones que son tan ricas en ese lugar.

La superstición o la cábala nos crean la ilusión de que se puede lograr el éxito o evitar la mala suerte. Por eso, Novelli las define como parte de un afán controlador; un intento de influir en la realidad y apropiarse de ella.

La superstición no arribó a América con Cristóbal Colón, pero éste contribuyó a su expansión.  Ante una navegación incierta y alargada,  sus hombres creían que los naipes podían apaciguar a las olas, así que, en medio de una feroz tormenta, arrojó un mazo de cartas al agua y logró que se serenara la tripulación, aunque el mar siguió igual.

Todos los personajes de los que hemos hablado son o fueron  conocidos por su afilado razonamiento, y aun así creían en lo paranormal, con una notable  incoherencia entre raciocinio y superstición, por lo que los psicólogos han empezado a estudiar por qué algunos son incapaces de acabar con su creencia en supersticiones, y han reafirmado que trastornos obsesivos o compulsivos están  muy asociados a supersticiones. Y parece ser que es porque creer en cosas que desafían la lógica podría tener sus ventajas, ya que pueden ser una especie de protección mental frente a los difíciles retos de la realidad.

Yuri Gagarin y la carrera espacial.

Un ejemplo curioso es el del ruso Yuri Gagarin. El primer hombre que viajó al espacio creó un ritual que siguen ahora todos los astronautas rusos. Hizo que el vehículo que lo transportaba hasta el cohete se detuviera para orinar minutos antes del despegue. Estas dos acciones son copiadas ahora paso a paso por todos los astronautas rusos.

Los mitos, leyendas y tradiciones han estado presentes en los lanzamientos desde la primera puesta en órbita de Yuri Gagarin en abril de 1961.  Se considera que estas supersticiones han ayudado a que la Unión Soviética, ahora Rusia, haya tenido pocos accidentes espaciales.

No todo tiene sentido, pero cuando estás a punto de sentarte encima de300 toneladas de combustible altamente inflamable,nadie quiere tentar a la suerte pasando por debajo de una escalera.  Esta es una lista de algunos de los rituales que hay que seguir antes de subir a bordo de un transbordador ruso:

Los astronautas a punto de despegar reciben el aplauso de las animadoras.una fila de mujeres, también vestidas con abrigos, sombreros y guantes, quienes agitan pompones dorados en el aire.

Una de las soluciones diseñadas por los fisiólogos espaciales rusos es intentar desorientar deliberadamente a los astronautas antes de que despeguen. Unas pocas horas antes del vuelo, cada miembro de la tripulación se sienta en una silla giratoria y comienza a girar. También se tumban boca abajo en unas camas especiales que les preparan para la experiencia de gravedad nula que van a experimentar pronto.

En el cosmódromo de Baikonur se han plantado a lo largo de los últimos 50 años muchos árboles, cada uno de los cuales representa cada misión y a los cosmonautas que volaron. No solamente conmemoran a aquellos que tuvieron éxito  sino que también es un homenaje a los que no volvieron. Esta tarea es sencilla en la primavera de Kazajistán pero durísima en el crudo invierno, cuando la tierra está dura como una roca.

Según IMDb, “The White Sun of the Desert” es una película del oeste con un toque ruso.  Protagonizada por el actor Anatoly Kuznetsov, trata de un soldado del Ejército Rojo al que se le ordena guardar el harén de un líder guerrillero del Mar Caspio.  Cada astronauta que ha volado desde Baikonur desde principios de los 70 ha visto religiosamente esta película antes de cada lanzamiento.

Otra tradición que la tripulación estampe su firma en el transbordador a modo de aprobación de que la aeronave cumple con los requisitos necesarios para volar.  La tripulación también firma en un muro del museo de Baikonur y en la puerta de su habitación tras su última noche en tierra firme.

Se considera como mala suerte que la tripulación vea cómo el cohete se traslada hacia la plataforma de lanzamiento, por lo que los astronautas se mantienen alejados.  La Soyuz es transportada desde su hangar en una línea ferroviaria, empujada por una locomotora diesel a lo largo de varias horas.  Cuando el tren se mueve hacia la plataforma, los espectadores y familiares ponen monedas en la vía para que las ruedas las aplasten.  Se cree que esto trae buena suerte a la misión, y hasta el momento esta costumbre no ha provocado descarrilamientos o ningún otro accidente.

En los videos del interior de la cápsula de cualquier lanzamiento ruso, se puede ver un peluche colgando del panel de control. Pero estos juguetes no solo sirven como mascotas, también sirven para un propósito serio: cuando la Soyuz alcance la órbita, los peluches flotan libremente indicando que los astronautas están en estado de ingravidez

Además un sacerdote de la iglesia ortodoxa rusa bendice los cohetes en la plataforma de lanzamiento. Y todo esto ocurría en un mundo extremadamente hostil a las religiones y a las supersticiones y el misticismo.

En abril de 1961, Gagarin fue amarrado a su cápsula en la plataforma de lanzamiento; se habían cerrado compuertas, realizado comprobaciones y estaba listo para volar. Con nada que hacer salvo mirar al panel de instrumentos a unos pocos centímetros de su cara, pidió al equipo de control que pusieran algo de música por el intercomunicador, por lo que tocaron canciones de amor rusas.  Exactamente lo mismo pasa hoy, aunque la selección musical es más amplia en cuanto a gustos y es seleccionada por la tripulación entera.

Probablemente la tradición más extraordinaria del programa espacial ruso también se remonta a la época de Gagarin. En su camino hacia la plataforma de lanzamiento, Gagarin pidió al conductor de autobús que parara para hacer sus necesidades.  Salió y orinó en el neumático trasero derecho. Los astronautas masculinos aún salen del autobús, se bajan la cremallera y orinan en el neumático trasero derecho. Se sabe que las astronautas mujeres traen muestras de su orina para echarlos en esa rueda.

En toda la historia de los vuelos al espacio rusos y soviéticos, sólo cuatro cosmonautas han perdido la vida durante una misión: el piloto de la Soyuz 1, Vladimir Komarov, en 1967 y la tripulación de tres hombres de la Soyuz 11 en 1971.  Ninguna otra nación tiene tan distinguido registro y los rusos están orgullosos de mantenerlo.

La lógica de la superstición dice que si algo se hace de una forma determinada y todo salió  bien, entonces no hay que cambiar nada.

Supersticiones de boda

Usar velo, llevar algo prestado, evitar que el novio vea a la futura esposa antes de la ceremonia; los matrimonios suelen ser eventos llenos de tradiciones y rituales. Estos son algunos de los más practicados.  Esta costumbre nació en la antigua Roma, cuando se creía que de esta forma la novia se protegerá de las miradas envidiosas y de los celos

Cuando hablamos del día del matrimonio es irremediable pensar en todas aquellas supersticiones, rituales y tradiciones a las que se ve enfrentada la pareja el día del enlace. Y es que seguramente habrás escuchado que si te barren los pies te quedarás solterona o que si se te caen un cuchillo y un tenedor al mismo tiempo, pronto habrá una boda. Las más relevantes son:

El novio nunca debe ver a su prometida con el vestido de novia. Esta creencia tuvo sus orígenes en la época en que los matrimonios se realizaban por conveniencia y la familia de la novia evitaba que su futuro esposo la viera antes de la ceremonia, buscando asegurarse de que no se arrepintiera.

Las perlas. Son quizás las joyas que mejor le sientan a la novia, debido a su color blanco o nacarado que combina a la perfección con el vestido.

Atar cintas y latas a la parte trasera del carro en el que se irán los novios, pretende asustar a los malos espíritus y ahuyentar los sentimientos de envidia.

Que el novio cargue a la novia a la entrada de su nueva casa.  Esta tradición comenzó en Europa Medieval, época en la que muchos consideraban que la novia podría ser atacada por espíritus malignos a través de las plantas de sus pies, y también hay quienes aseguran que esta práctica asegura la felicidad de la esposa al saber que su marido es suficientemente fuerta para sostenerla.

Lanzar arroz. Se trata de una tradición tomada de oriente en la que los invitados lanzan arroz al final de la ceremonia, para atraer la buena fortuna, la prosperidad y la procreación; sin embargo, en la actualidad el arroz se ha sustituido por pétalos de flores o burbujas.

Los mejores días para casarse. El lunes, por ser el día de la Luna, asegura la fertilidad, el viernes por ser el día de la diosa Venus, atraerá el amor duradero y el domingo, día del Sol, atraerá la felicidad a la pareja.

Que llueva durante la boda. En España es común que las parejas ofrenden una docena de huevos a Santa Clara para pedirle que haga buen tiempo. Por el contrario, en otras culturas, la lluvia el día del matrimonio simboliza fertilidad y purificación. Si alguien cree que es de mal augurio, ya hice referencia al día en que me casé y mi largo matrimonio.

Supersticiones de nochebuena y año nuevo.

Todos queremos empezar el nuevo año con energía y felicidad, así que no están de más estos rituales.  Un brindis chocando las copas permitirá que la usemos la próxima navidad.

Barrer la casa y tirar la suciedad fuera para eliminar todo lo malo. Es muy usual en Cuba tirar un cubo de agua hacia la calle en señal de arrojar todo lo negativo. También enumerar las cosas malas en un papel, quemarlo y tirar las cenizas al viento.

Otra costumbre en Cuba es vestir ropa interior amarillas, en otros países deben ser rojas.

Es muy extendida y no puede dejar de hacerlo un cubano, la costumbre española de comer 12 uvas junto con las 12 campanadas y brindar con sidra o champán.

Y la más empleada en Cuba, la ya citada de sacar una maleta y dar una vuelta a la manzana con ella.

Herraduras

Existen registros de que la herradura ya era considerada un amuleto poderoso desde la Grecia antigua. Primero, porque era hecho de hierro, elemento que según los griegos los protegía contra el mal. Además, su forma recordaba la luna creciente, símbolo de la fertilidad y la prosperidad. Los romanos, herederos de gran parte de las tradiciones griegas, también adoptaron esa superstición y la extendieron por su imperio

Según la tradición, la herradura de la buena suerte debe ser colocada arriba de la puerta, con las puntas hacia arriba, de lo contrario la suerte se irá.  Pero en algunos países, como España, se cree que la herradura debe estar puesta hacia abajo, para que la suerte se expanda por toda la casa.

La astrología y los horóscopos

La creencia en la astrología sigue muy arraigada en la sociedad y se promueven sus prácticas supuestamente adivinatorias. El secreto de su popularidad está en esa componente psicológica que apela a las emociones de la gente y su necesidad de aferrarse a algo tangible que dé respuestas y arroje luz sobre un destino incierto.

No existe ningún argumento científico que respalde sus teorías, que se han vuelto objeto de culto y seguimiento diario mediante periódicos, revistas, programas de radio y televisión y otros medios.

Sus postulados se basan en que a partir de la observación e interpretación de la posición y el movimiento de los astros, es posible conocer y predecir el destino de los seres humanos y pronosticar los sucesos terrestres. Sostiene, además, que dicha posición en el momento del nacimiento de un individuo influye en su carácter pero no se han confirmado tampoco  las correlaciones esperadas partiendo de las hipótesis astrológicas.

Salvo del hecho de que las fuerzas de las mareas causadas por la influencia lunar, pueden afectar la vida de los que viven cerca de las costas, lo cual tiene un sustento científico,  el resto no ha dado pruebas de que la posición o influencia de planetas y estrellas, pueden determinar nuestras vidas.

Hitler,  fanático de la astrología.

Es conocido que Hitler fue asesorado por astrólogos para diseñar sus operaciones e Inglaterra tuvo un Departamento de Investigación Psicológica, para montar predicciones astrológicas contra el Führer.  Ahora, después que acabó el horror de la Segunda Guerra Mundial y el holocausto quedó, no olvidado, pero si relegado, se emiten muchísimos análisis sobre la carta natal de Hitler, y se pone en duda la fecha de su muerte, cosas que no sirven de nada.

Hitler, tras sufrir un atentado en Munich en 1939, en el que perdieron la vida ocho personas y que la Gestapo investigara que Krafft no sabía nada de aquella conspiración, los nazis comenzaron a creer en las predicciones del astrólogo. Alemania estableció un Departamento Astrológico cuya función sería ayudar a diseñar estrategias militares, que fue un verdadero fiasco.

Karl Ernst Krafft astrólogo y grafólogo suizo, recordado por haber colaborado con el régimen nazi y que era consultado asiduamente por Rudolf Hess y Heinrich Himmler y al que Hitler le encargó estas tareas, finalmente fue considerado un traidor y enviado a un campo de concentración, donde murió.

Pero lo que estaba escrito en las estrellas nadie lo pudo interpretar, ni la derrota aplastante de los nazis, ni la muerte de Hitler, ni la pérdida de más de 70 millones de vidas humanas. Resumiendo, la astrología no sirve absolutamente para nada, salvo para que los incautos lo sigan y le den vida a los charlatanes que viven de sus “predicciones”.

Horóscopo Chino y el Azteca.

No sólo existe el horóscopo occidental que todos nosotros conocemos. También existen otros muchos, como por ejemplo, el horóscopo árabe, el azteca, el celta, el egipcio, el hindú, el maya o el chino.

El Horóscopo Azteca está formado por doce signos que están representados por animales, vegetales y otros objetos asociados a símbolos sagrados. Nuestro día y mes de nacimiento nos indicarán cuál es nuestro signo y ascendente aztec

Estos Simbolismos son, a saber, el ciervo, el caimán, la casa, la flor, la serpiente, el jagur, la caña, el conejo, el águila, el mono, el pedernal y el perro.

El horóscopo chino tiene una tradición de 5000 años y se basa en los años lunares, que al igual que el calendario que empleamos es una convención que se ha hecho costumbre. Se basa en que cada año se bautiza a las personas con el nombre de un animal, el cual regirá en ese ciclo. Gran parte de esta costumbre tiene sus orígenes en el antiguo Taoísmo chino.

Si bien cada animal rige un año lunar, los cinco elementos gobiernan diez años. Cada elemento reina dos años, uno bajo el signo del Ying y otro bajo el signo del Yang. De esta forma se establece el equilibrio, que es fundamental en la concepción de la filosofía china.

El horóscopo chino nace de una leyenda. Buda convocó a los animales de la tierra y solo 12 se presentaron y lo hicieron en este orden: la rata, el buey, el tigre, el conejo, el dragón, la serpiente, el caballo, la cabra, el mono, el gallo, el perro y el cerdo. Como premio a su lealtad, Buda los convirtió en los Doce Signos del Zodiaco Chino.

Se asignan por el año en que se nace y no el mes y cada uno representa las cualidades y los defectos atribuibles a ese animal. Por supuesto que tampoco tiene un sustento científico.

Amuletos tradicionales cubanos

Para contrarrestar la mala suerte del martes 13, el viernes 13, o cualquier momento, las personas usan amuletos como tréboles de cuatro hojas, ajos, campanas o cascabeles, visten de rojo, patas de conejo, cuarzos, listones rojos, estampitas de santos protectores, hojas de ruda, y otros inimaginables. Además de esto, también se suele prender velas blancas para evitar que espíritus malignos entren en el hogar.

Los cubanos le concedemos a esos amuletos tradicionales múltiples y variadas funciones. Por ejemplo, nos sirven para ahuyentar la mala suerte, las perniciosas influencias, el mal de ojo. Y según nuestras creencias, igual nos proporcionan salud, amor, prosperidad, fortuna, fama y seguridad, entre otros muchos “beneficios”.

Para la buena suerte utilizamos las herraduras de hierro, ubicadas detrás de la puerta de nuestros hogares, que hayan tenido uso preferentemente, con las puntas hacia abajo, adornada o no con una cinta roja. No pocos en Cuba portan minúsculas herraduras en sus cadenas al cuello y las mujeres en pulseras.

En la mayoría de las viviendas cubanas los visitantes encontrarán casi sin falta la presencia de un animal ajeno por completo a nuestra fauna: el elefante. Puede ser uno o varios mamíferos, de metal o cerámica, pero para proporcionarnos la buena suerte apetecida deben tener el trasero dirigido hacia la puerta de acceso a la casa. O un buda sonriente de frente a la puerta.

El siempre temido mal de ojo, cargado de envidia u odio, tratamos de prevenirlo de varias formas. Colocando a nuestro bebé un prendedor en su ropita y la cuna con un pequeño azabache, acompañado de un par de Ojitos de Santa Lucía, elaborados en metal plateado o dorado, y de un fragmento en forma de diminuta cuenta de coral rojo.  Si sientes que ningún amuleto puede atraer a tu vida una gran racha de buena suerte, quizá es hora de probar uno dirigido a tu signo del zodiaco.

Y hay muchísimos otros, como son

Una tira de tela roja en la ropa, vehículo u objeto.

Un diente de ajo en el monedero

Una hoja de vencedor o de albahaca en el tronco de la oreja.

En la sala, un platico adornado con un ojo y una lengua atravesada por un clavo para las malas lenguas.

Guano bendito tras la puerta para alejar de casa enemigos y enfermedades.

Un caracol cinturita, una bolsita de saco, una piedra de mar

Una astilla de canela en la punta de la lengua para hablar y convencer a ese prójimo que se resiste tanto.

Una lengua de vaca (la planta) sembrada a la entrada de la casa.

Un jarro de agua limpia tirada antes de salir por la puerta para no pisar el probable polvo de mala suerte.

Una cruz de cascarilla en la planta del pie.

Una herradura detrás de la puerta

Un elefante de adorno en la sala, con la parte trasera apuntando hacia la salida

Hay conductores de auto que llevan un rosario colgado en el espejo retrovisor o la estampa de  San Cristóbal para propiciar la protección de los viajeros durante el trayecto.   En México prácticamente todos los autos lo llevan y por supuesto que los accidentes están en peligro no solo porque en México no hay cultura vial (no respetan las sendas, cambias de unas a otras sin señalamiento de luces o de manos, si van a girar a la izquierda van por la senda contraria, etc) sino porque al pasar por delante de una iglesia o de las miles de imágenes de santos reales o de conveniencia que existen en todas partes tienen que persignarse y sueltan el timón.

En el México de hoy se usan como amuletos  además de los  ya  mencionados: el ojo de venado para el mal de ojo, el de la Santa Muerte y   el “Amarrador” utilizado para amarrar al ser amado. No pueden faltar  los carneritos (borreguitos)  que se cuelgan en las entradas de las casas para atraer la buena fortuna para nuevo año.

El kilo prieto

 

Tampoco se sabe a ciencia cierta cuándo ni porqué se comenzó a llamarle kilo al que debió ser llamado céntimo o centavo. Su génesis estaría enmarcada en la segunda década del pasado siglo, cuando Cuba estableció su propio sistema monetario frente al circulante estadounidense y español, pero se mantuvo a nivel equivalente la moneda norteamericana.

Como tradicionalmente la santería emplea el kilo, si es “prieto” mucho mejor, para “limpiezas” y “despojos” espirituales, al parecer el kilo ha absorbido ciertos maleficios que lleva a cuestas.

Sobre todo a partir de 1959, en que ha sido colocado en situación absurda.  Sin olvidarnos la moneda de cinco centavos norteamericana que tenía entonces grabada un indio, que también es utilizado en la brujería cubana.

Si San Lázaro o la Virgen de la Caridad del Cobre pudieran juntar todos los centavos ofrendados históricamente por sus devotos en sus santuarios o en iglesias, no creo equivocarme al afirmar que serían millones. Centavos muy bien ganados con el sudor de su frente, o dicho en otros términos, haciendo milagros. Aunque nunca termino de comprender por qué, si es tan milagroso concediendo salud, preservando vidas, librando de grandes peligros y despejando caminos, se le gratifique con la más insignificante de las monedas.  Debe ser porque sus fieles son los más pobres y solamente pueden ofrecer la moneda de menor valor.

Resumen

Personalmente, debo decir que tenía (un eufemismo, pues era propiedad estatal, de mi trabajo) un auto Lada que se pasaba la vida roto, me dijeron que le atara una cinta roja para que no sufriera desperfectos. Terminó hecho chatarra. La falta de mantenimiento y de piezas de repuesto no las pudo resolver la cinta roja.

Muchos de nosotros llevamos un amuleto en la ropa, o guardado en alguna parte de la casa; cuando nos preguntan por qué razón respondemos con la expresión: “por si las moscas” como sinónimo de “por si acaso”, una manera de prevenir consecuencias desagradables una vez que hemos realizado alguna acción, como medida de precaución ante posibles eventualidades.

Su origen se piensa que viene de la costumbre de tapar los alimentos una vez cocinados o justo antes de hacerlo, ante la creencia de que las moscas si se posaban sobre los mismos los podían echar a perder o también de cuando en 1287 las tropas de Felipe II de Borgoña invadieron a Girona, en España y al llegar a la tumba del patrón local, San Narciso, quisieron profanarla, pero cuando abrieron el ataúd se encontraron millones de moscas que los atacaron y contagiaron la peste.

Ante esta situaciones muchos dirían que sí creen,  aunque no logran saber por qué lo hacen, pero que tienen un sistema complejo de amuletos, sortilegios, fórmulas personales para decidir qué cosas deben hacerse para que un viaje resulte propicio,un proyecto prospere, y todo salga como uno desea.

Curanderos.

Este es un tema que no tiene fin. Viene desde los tiempos de la prehistoria y se mantiene en nuestros días y no es más que una parte del imaginario místico del ser humano.   Curanderos antes que médicos y científicos.  La mente humana no ha evolucionado lo suficiente para darse cuenta de lo real y la patraña.

La cura del agua. Antoñica Izquierdo.  Basada en hechos reales ocurridos en 1936 en la provincia de Pinar del Río,  se cuenta la historia de Antoñica Izquierdo, una campesina que se atribuía poderes curativos por medio del agua.

Seguida por una multitud de creyentes, manipulada por los políticos y especuladores de la época, quienes por supuesto ven un fuerte aliado en beneficio propio al oscurantismo y los prejuicios del pueblo, terminó finalmente en la prisión, porque le estaba poniendo malo el negocio al cura.

En ese entonces, la crisis económica mundial y la falta de esperanzas  marcaba el horizonte, y los más pobres, abandonados a su suerte, con la miseria y el desamparo, no tenían otra esperanza que la fe, o el delirio para tratar de sobrevivir, como hizo Antoñica, con sus curas por agua y su dicho de “perro maldito al infierno”, que la llevaron a la demencia y a su muerte en un hospital psiquiátrico tristemente famoso en Cuba: Mazorra.

Antoñica da origen al desarrollo de lo que se conoce como los acuáticos, personas que creen en los poderes curativos del agua y que aún mantiene esta creencia religiosa. Pero no fue la única que empleó el agua.

Clavelito

Ya hemos hecho referencia en otros artículos a este curioso personaje cubano, de origen campesino, quien de su abuelo, José Clavelo heredó su nombre artístico “Clavelito”. Durante su juventud fue vendedor callejero, voceando frutas y pollos.  Con talento poético es nato,  llegó a ser uno de los mejores repentistas (improvisadores de la música campesina) de Cuba , siendo un gran autodidacta,  por eso además de cantar música guajira, compuso canciones en diferentes géneros de la música cubana y escribió libros de poemas y de consejos u orientaciones psiquiátricas, siempre tratando de ayudar a sus semejantes.

En la  Emisora Unión Radio, se le dio la facultades a “Clavelito” para aparte de actuar produjera el tipo de programa que quisiera. Así tiene la oportunidad de producir su propio programa nombrado “Aquí está Clavelito”, que comenzaba con una tonada campesina en la que el propio Clavelito cantaba la décima famosa de “Pon tu pensamiento en mí…”.

Pon tu pensamiento en mí

Y verás que en este momento

Mi fuerza de pensamiento

Ejerza el bien sobre tí.

Acerca de los problemas de los que le contaban sus oyentes él les aconsejaba mediante sus improvisaciones, pidiéndoles que antes pusieran un vaso de agua sobre el radioreceptor, y que se concentraran en la misma para que pudieran beneficiarse de sus poderes curativos.  Para su sorpresa empezaron atribuirle milagros, porque lo mismo curaba a un desahuciado, armonizaba un hogar con problemas, adivinaba los números de la lotería, buscaba un novio a la más fea, consolaba a cualquier afligido, etc. “El agua de Clavelito” se convirtió en el programa más escuchado de la radio cubana de todos los tiempos. Mientras tanto,  las vitrolas no cesaban de tocar “El agua de Clavelito”, pieza interpretada por la Orquesta Aragón, la más famosa de Cuba entonces.

También Clavelito fue el autor de muchas canciones que fueron un verdadero éxito, como “La Guayabera” que decía: “Quiero un sombrero de guano, una bandera, quiero una guayabera y un son para bailar”, un número musical antológico de la música campesina cubana.  

Todavía hay gente que piensa que la fuerza de mente de Clavelito hacía burbujear el agua del vaso. Recuerden que eran receptores de radio de tubos o válvulas de vacío que emitían bastante calor. Si dejabas algo un rato en ese lugar hasta podrías freír un huevo.

La ceiba

Cada civilización o país, tiene sus preferencias entre los árboles que predominan en su territorio, para satisfacer sus mitos.  Entre los celtas, era conocido el culto de los druidas al Roble; en la Grecia antigua, había un santuario en el que estaba prohibido bajo multa cortar un Ciprés; en el foro romano, se dio culto a la Higuera sagrada de Rómulo.  En muchas partes del África meridional, lo es el Baobab y así sucesivamente.

La ceiba, como la palma real, son los árboles más característicos de la Isla y la Ceiba se ha convertido en el árbol sagrado por excelencia. Este carácter de ser el más importante de toda la flora es porque es muy utilizada en los cultos mágico-religiosos cubanos.

Es común ver, sobre todo en las ciudades, al pié de cualquier Ceiba, frutas con cintas rojas, calabazas, plátanos, animales muertos y los más diversos artículos, resultantes de “trabajos” de cualquiera de los cultos mágico-religiosos afrocubanos.

Si se interroga a un campesino blanco, a un  “guajiro”, sobre este misticismo que despierta la ceiba en todo el país, dirá invariablemente que “está bendita”, que sus mayores le han enseñado a adorarla, porque “es lo más sagrado”. Y todos repetirán que la ceiba es santa, que  es el árbol de la Virgen María, es el árbol del Santísimo .  Y para sustentar esto explican que los elementos de la naturaleza la respetan: no la abate, el huracán más fuerte ni la fulmina el rayo. Y si le preguntas a un negro, ni se diga.

La Ceiba también era el árbol sagrado de los mayas, que unía el mundo subterráneo de Xibalba con el mundo de los vivos y situaba una en cada uno de los cuatro puntos cardinales.

Cada 16 de noviembre la población habanera ha convertido en tradición, acudir a dar tres vueltas en derredor de la Ceiba sembrada en el Templete, frente a la Plaza de Armas, en el llamado Casco Histórico, situado en la parte más antigua de la ciudad, que para algunos es el lugar donde se celebró la primera misa en honor a la fundación de la Villa de San Cristóbal de La Habana. El público hace allí largas colas para cumplimentar esta ceremonia y en sano ambiente festivo pedir tres deseos.

En Cuba abundan los curanderos y sanadores, los que no tienen ningún conocimiento científico, pero todos dicen que en la ceiba está la muerte, la vida, la salud y la enfermedad. En sus raíces están enterradas las venturas, desventuras, las epidemias, el hambre y la abundancia.

Pero la Ceiba no está reservada en Cuba solo para los cultos sincréticos afrocubanos, también  en otro culto, solo practicado por determinados grupos de asiáticos llegados hace ya mucho tiempo a Cuba, la tiene en gran estima. Se trata de la devoción a San Fan Kon.

Este singular dios es Kuan Kung, que es ampliamente venerado en las comunidades de origen chino y se le considera uno de los más poderosos.

San Fan Kong, protector de los inmigrantes chinos en Cuba, parece estar relacionado con el mito creado en el poblado de Cimarrones, Matanzas, donde Kuan Kong o Cuan Cung (que actualmente es adorado en un altar en el Casino Chung Wah, en el barrio chino habanero), legendario personaje del país asiático, es la base de esta tradición. El nombre de San Fan Kon no es conocido como deidad religiosa en ninguna región de China, ni en otras comunidades orientales fuera de ella. Sin embargo,  desde el año 1880 hay constancia de la veneración a Kuan Kong en la mencionada villa matancera, la cual proviene de la historia del héroe chino Kuan Kong, que se remonta al año 220 de nuestra era, durante el combate entre las facciones de la dinastía Han, en la lucha por el trono imperial.

El culto se instaló en La Habana y se solidificó y basándose en la fe de los antepasados. Los chinos de Cuba, tienen por costumbre quemar inciensos y hacerle reverencias hincándose de rodillas ante la imagen de San Fan Kon, que se representa con el rostro pintado de rojo púrpura, color que para ellos simboliza la lealtad, la fidelidad y la vida.

Pero mi mayor acercamiento a la ceiba se dió, cuando niño, me aseguraron que el viernes santo a la hora que murió Jesucristo, cerca de las tres de la tarde, si pinchamos a una ceiba, ésta sangraba. Con el tiempo me di cuenta que seguramente se refería a las numerosas espinas de ese árbol, que de solo acercarte a él iba a echar sangre, pero  la tuya.  De todas maneras en mi casa no me dejaban acercarme a ninguna ceiba, porque siempre estaban repletas de brujerías y si pisaba o tocaba una de ellas podría hacerme daño.

México, letrados van a curanderos antes que médicos.

Desde la prehistoria chamanes, curanderos y brujos curaban enfermedades. Existieron en todas las culturas incluyendo las de México.

La relación entre médicos y curanderos fue desde los tiempos del virreinato, una lucha constante por alcanzar el monopolio del saber curativo, sobre todo, por obtener la exclusividad de la práctica médica.

Ya con la independencia en el siglo XIX, ante las actividades de curanderos y parteras no faltaron las propuestas de un control estricto.  Además hace un recuento de los errores y defectos en la práctica cotidiana de la medicina en esos tiempos: que el médico prolongue la enfermedad en función del dinero, que el enfermo sea tratado por muchos médicos, que la gente no llame al médico en casos de enfermedad, que no pague los correspondientes honorarios, que se afirme la muerte de un paciente por la intervención médica,  que se olvide de la curación realizada por el médico señalando la eficacia  de algún  miembro del santoral católico, de una imagen religiosa o una oración piadosa, que no se distinga a buenos y malos doctores, aquellos que ni los son y que se ostenta como tales, y por último que la gente no sepan elegir a un buen médico.

Desgraciadamente esta comercialización de la medicina y la creencia en fuerzas sobrenaturales, priman sobre los conceptos racionales de que la ciencia es la única capaz de curar enfermedades o propiciar una vida con mayor calidad ante aquellos casos insalvables. Es una especie de remedio y fe de la solución de algo, por su alto costo, como es la medicina en México, no está al alcance de la mayoría de la población.

Pero a pesar de ese razonamiento, no es raro conocer personas con determinado grado de cultura y de posición social, que aún pudiendo ir a consultas médicas porque su condición económica se lo permite, prefieren visitar a curanderos, que en un caso cercano, le habían diagnosticado diabetes y durante años estuvo con hierbas y tratamientos espirituales de un curandero, que finalmente le dijo que ya se había curado de su padecimiento. Poco tiempo después tenía valores de glucosa cinco veces mayores que los normales y si no va al médico seguramente estuviera acompañando a los espíritus asesores del curandero.

Otras personas prefieren llevar al familiar a un practicante, curandero o sobador, que al final provoca mayores males que los que padecía el enfermo. E igualmente eran personas que  tenían recursos para ir a un buen médico.

Quiere decir que son costumbres y creencias profundamente arraigadas en la conciencia popular, y me estoy refiriendo a México, donde la medicina de calidad es prohibitiva para la mayoría de la población, es básicamente un negocio y no atiende para nada al juramento de Hipócrates, pero en Cuba, cuando la salud pública tenía parecidas carencias (nunca tan graves como las de México, sobre todo gracias a las clínicas mutualistas de las sociedades españolas), también proliferaban los curanderos, sobadores y hasta los falsos profetas, como lo fue Antoñica Izquierdo y su cura del agua, Clavelito con su agua que burbujeaba ante el aparato de radio y otros como la Estigmatizada o los miles que en barrios y zonas campesinas hacían su zafra.

No voy a incluir en esta categoría a las parteras o comadronas, porque mi hermano y yo vinimos al mundo con una de ellas y además no apelaban a ningún tipo de procedimiento extrasensorial, sino a su experiencia práctica en otros partos, por lo que ante la falta de un sistema de salud universal, salvaron muchas vidas, de niños y de madres.

Las insuficiencias, inexistencia o caída en picada de la salud pública hace que infinidad de personas apuesten por una solución mágica a sus enfermedades, por lo que en Cuba, a pesar de existir un sistema de salud universal, la gente también acude a los curanderos.

En el realismo mágico de América Latina la sanación milagrosa tiene una larga historia. Se dice que la larga estancia en el poder de Fidel Castro se debió a que era un devoto furibundo de la magia negra. Pero al final la santería no pudo evitar lo inevitable. Y por suerte la ciencia tampoco.

Lino Tomasén, el médico y curandero que sana solamente con las manos.

Y mejor ni hablamos de los adivinadores, cartománticas y babalawos. Todos de alguna forma tienen habilidad para profundizar en la psiquis de los consultados y obtener la información para las respuestas que le van a dar o las profecías que van a hacer.  Si de verdad fueran adivinos no estarían haciendo el trabajo que hacen de timar a incautos y tendrían un nivel de vida mucho mejor.

Proliferan en Cuba los curanderos y sanadores sin ningún respaldo científico. No es el caso de Lino Tomasén, médico graduado, un negro inmenso que cura con los dedos. Su consulta siempre está abarrotada de cubanos y extranjeros.

A todos ellos, a los políticos y a los ministros de todas las religiones les satisface enormemente que el hombre sea supersticioso.  La superstición es quizás la forma más “light” de la ignorancia. De ella no se salvan ni los ateos ni los agnósticos.

Es tan fuerte esta creencia que hasta en la ciudad donde vivo, Irapuato, hay un consultorio de santería cubana.  Cada vez que paso frente al mismo, lo encuentro lleno de gente.

Por si acaso

Por si acaso, en mi cartera hay un kilo prieto, un billete de 2 dólares norteamericanos y una estampita de la virgen del Cobre.  Ningún cubano se libra de tantas supersticiones que lo han marcado desde que nació, cuando le pusieron su azabache con los ojitos de Santa Lucía para los malos ojos. Y de ahí en lo adelante ni se diga. Y si pasa, como me ocurrió a mí, una revolución socialista por arriba de tu vida, pues no te queda otro remedio que ser supersticioso a matarte, a ver cómo te puedes quitar esa “salación” de encima. Por si las moscas.