Hechos que marcaron mi niñez. Segunda Parte.

Hechos que marcaron mi niñez. Segunda Parte.

La peregrinación de Irma, “La Estigmatizada”, una combinación de show y paseo.

En la Semana Santa de 1956 en Cuba, una muchacha de solo 19 años de edad, nombrada Irma Izquierdo, natural de Güira de Melena, en las afueras de La Habana, acapara la atención mediática, pues comienza a sufrir de estigmas con marcas de latigazos en varias partes del cuerpo, señales de clavos en manos y pies y las letras INRI en los muslos. Desde niña afirma tener visiones donde veía santos, al propio Jesucristo y se obsesionó con el suplicio sufrido por éste. Estas marcas se agudizaron al acercarse la Semana Santa y comenzaron a llamarla “La Estigmatizada”.

A pesar de que lo que se decía ella no iba caminando por las carreteras en su viaje desde La Habana hasta El Cobre, en Santiago de Cuba con la cruz de madera a cuestas, todo era un truco publicitario. Pero esta había sido su arma más poderosa, caminar novecientos kilómetros a lo largo del país con una cruz a cuestas, aunque fuera mentira, era algo sorprendente.

En ese entonces todos pensaban que La Estigmatizada a pesar de ser una mujer joven sería triste y sufrida y estaría ensimismada en sus pensamientos como corresponde a una religiosa fanática extrema, pero realmente era todo lo contrario, era una mujer de 19 años alegre, simpática, conversadora y sociable, lo más alejado del aura extraterrenal o divina que se le había asignado por la prensa y sus seguidores. Por lo general estas personas con una devoción poco común son introvertidas y de carácter recogido, pero su personalidad era totalmente opuesta. No hay nada de místico en su recorrido, sino exclusivamente una ambición de que su gesta sea bien promocionada, como el artista que se nutre del aplauso del público.

Todos pensaban que Irma se pasaba el día en la carretera, bajo nuestro fuerte sol, cargando con la cruz pesada sobre sus hombros, durmiendo a la intemperie y apenas comiendo.

La realidad era todo lo contrario, no estaba delgada, al contrario ella mismo dijo que había aumentado siete libras en lo que llevaba de trayecto, apenas comienza a caminar y alguien de los pueblos de donde sale toma la cruz y después es relevado por otro y así sucesivamente. Cuando decide no caminar más, tras tres o cuatro horas de camino en donde el único esfuerzo que hizo fue caminar, termina la jornada, deja la cruz en una casa, casi siempre pobre, la que acogen agradecidos, y se va al pueblo más cercano montana en un pisicorre azul del propio año, 1956, y se encamina a su hospedaje, sea un hotel o familias que la quieren acoger. En el pisicorre van su equipaje y hasta refrescos fríos, como si fuera un picnic.

Al día siguiente se sube al pisicorre, regresa a donde dejó la cruz y reinicia la marcha, y tras unos pasos otro fiel devoto se hace cargo del trabajo duro de arrastrar la cruz. Cuando se acerca a algún pueblo, Irma, que va delante de la procesión, toma nuevamente la cruz, atraviesa el pueblo con ella a cuestas y todos salen a contemplar y se persignan ante su paso y la ven como una heroína.

Irma era joven, delgada y menuda, por lo que caminaba con mucha vitalidad y afirmaba que Dios le ha ordenado cumplir esa misión. Cuando lo normal es caminar cuatro o cinco kilómetros por hora, ella avanza a un ritmo de siete u ocho.

Un reportero que la acompañó en gran parte del recorrido afirma que nunca la vió rezar ni entrar a una iglesia, aunque recoge el hecho de que reza por las noches y se siente católica pero no fanática y no tiene nada de curandera o algo parecido, no obstante lo cual muchos se le acercan para que toque y rece por sus hijos enfermos.

Hay una explicación científica del caso, por lo que hay mucha gente que dice que todo es una superchería, aunque la conclusión se vuelve un poco difícil cuando sufre las crisis y brotan los estigmas, y las visiones que dice tener, sobre todo de la presencia de Dios, que hacen confuso el caso. En esos momentos, haciendo uso del mejor histrionismo o de una realidad solo en su mente, dice sentir los latigazos que le dieron a Jesús y surgen surcos de sangre en su espalda y pecho y marcas de los clavos con lo que sujetaron las manos de Cristo a la cruz. Unas pruebas médicas que le hicieron durante su peregrinar, dieron que el tiempo de coagulación y hemorragia dieron normales y la fragilidad capilar fue negativa, pero las letras INRI en sus piernas determinaron que eran provocadas por un simple dermografismo.

Ella hace el viaje con su esposo, otros familiares, su cuñado que maneja el automóvil y los suegros así como una escolta del ejército. Y el viaje, señala ella, le ha permitido conocer a Cuba, desviándose de la Carretera Central para conocer lugares como el Salto del Hanabanilla y Topes de Collantes.

Cuando camina de noche va con ella una multitud de seguidores, porque es más impresionante ir con faroles encendidos, velas y casi se vuelve una imagen fantasmal la caravana, la que interrumpe el tránsito y se oyen gritos de admiración, bendiciones y gritos de crítica. En una de esas caminatas se desmayó, pero aparentemente fue porque ese día no había comido, así que un trago de Poción Jacout resolvió la situación.

No tanto en la capital, pero en el interior del país, el tema de actualidad del que todos hablaban era la peregrinación de La Estigmatizada, y ella contribuía al show tomando la cruz cuando entraba a un poblado y no la soltaba hasta salir de él, dándole o realzando el carácter religioso y sobrenatural de su caso. Del tiempo muerto, la política, el calor, la pelota y la situación económica pasaban a un segundo lugar y lo relevante eran los estigmas de Irma.

El cuadro clínico de Irma Izquierdo no representaba nada extraordinario ni novedoso para la ciencia; era un caso más de la histeria, pero tras la revolución emigró a los Estados Unidos, donde aún siguió manifestando los mismos síntomas, sobre todo en fechas señalados y su caso estudiado por eminentes psicólogos y psiquiatras. Pero ya no volvió a llenar las primeras planas de los diarios ni los noticieros televisivos o radiales.

Irma se tornó en una figura de relieve en la actualidad nacional y hasta internacional, sus revelaciones y su peregrinar hasta el Santuario de El Cobre con una cruz a cuestas la hizo famosa y las discusiones sobre su caso eran apasionadas.

Mientras para unos es una escogida de Dios, para otros es una farsante. La iglesia se mantuvo al margen del suceso hasta que hubo un pronunciamiento del vocero del Cardenal Arzobispo de La Habana, quien explicó que aunque hacía esos pronunciamientos a título personal no consideraba el caso como una estigmatizada genuina según los cánones de la iglesia católica, y las cree causadas por la autosugestión, el histerismo o trastornos neuropsíquicos, comparándola con el hecho de que en la historia de la Iglesia han ocurrido verdaderas estigmatizaciones, muy pocas realmente, y sobre todo en la historia de los santos, como fueron los casos de Santa Gemma Galgani y San Francisco de Asís, casos probados de lesiones de origen sobrenatural. Concluye así la definición de que el caso de Irma es una crisis de alucinaciones dignas de ser estudiadas por la psicopatología, que alimentada por la publicidad ha llegado a considerarse lo que no es, sino una cuestión de científicos, no de Teólogos.

Psiquiatras, Psicólogos, Alergólogos y Fisiólogos coinciden con la conclusión anterior, por lo que la ciencia médica demostró que no había ni milagros, ni misterio sobrenatural alguno presente.

Pero Irma tuvo sus cinco minutos de fama.

Hasta la Reina Isabel baila el danzón

Viendo la magnífica serie de Netflix, “The Crown”, recuerdo los momentos en que el hecho de que una joven de veintiséis años se convertía en la monarca del Reino Unido fue uno de los temas de comentario más recurridos en La Habana de 1952, lo que no cesó de ser la comidilla hasta su coronación el 2 de junio de 1953, noticia que sólo fue interrumpida por el golpe de Estado de Batista.

Es precisamente en esa serie, en su segunda temporada, cuando el exitoso primer ministro Harold Wilson, le comunica a la reina su renuncia a causa de estar enfermo de cáncer, ésta le comenta que su hermana Margarita se quiere divorciar y como son dos noticias relevantes, éste le responde que le informe a la prensa del escándalo en la familia real primero y su renuncia al día siguiente, porque siempre un hecho impactante va a quedar opacado por otro de similar magnitud, y así fue, con la renuncia de Wilson, ya nadie se ocupó más de las aventuras de la princesa, que con sus amoríos primero con el CapitánPeter Townsend, ayudante de su padre el rey y después en su controvertido matrimonio con el fotógrafo Antony Armstrong-Jones, y su conducta alocada, siempre estaba presente en la prensa.

Años antes, la historia de la abdicación de Eduardo VIII, fue una noticia que constituyó un escándalo mundial, porque renunció al trono por crear una crisis constitucional al proponerle matrimonio a la norteamericana Wallis Simpson, una mujer divorciada, por lo que los ministros le recomendaron no se casara pues nunca sería aceptada como monarca constitucional al ser además el rey el jefe de la iglesia anglicana. Ello dio lugar a que su hermano Alberto, el nuevo rey Jorge VI asumiera el trono e Isabel, su primogénita, se convirtiera en Princesa y heredera del trono.

Isabel se destacó en su niñez y juventud por su disciplina, su responsabilidad y su amor por los caballos y los perros y para nada quería ser la reina, pero desde muy pequeña fue preparada para ese rol y tras la muerte de su padre el Rey por cáncer de pulmón asumió el trono.

Un artículo de la revista Bohemia, del 31 de mayo de 1953 expresaba: “En la Abadía de Westminster el próximo 2 de junio, una mujer encantadora será coronada reina de la Gran Bretaña. Isabel II se verá rodeada de la pompa y el esplendor fabuloso de los antiguos tiempos, en una ceremonia y una procesión que quizás no vuelvan a repetirse. En este artículo un famoso repórter revela las intimidades del fastuoso espectáculo que presenciarán más de seis millones de almas.”

Sesenta y siete años después, efectivamente, no se ha repetido una ceremonia similar.

“Hasta la Reina Isabel baila el danzón porque es un ritmo muy rico y sabrosón…”

Con el odio que acumuló el pueblo cubano hacia la corona española que no quería soltar a su “siempre fiel Isla de Cuba” y que explotó como a ninguna otra de sus colonias a pesar de no ser ni remotamente la más rica, pero sí la de ubicación más privilegiada y donde la gente más se parecía a los españoles y sus costumbres, no se cómo en Cuba podía haber gente fanática de las monarquías. Hasta muchos de los numerosos españoles que vivían en Cuba habían sido enviados a la guerra en la Isla y o se habían quedado en ella o habían regresado y otro grupo numeroso también eran desertores del servicio obligatorio y la guerra del Rif en Marruecos, y todos ellos eran antimonárquicos.

Tenía un compañero de estudios con el que compartía algunas jornadas dominicales en el Centro Asturiano o el Gallego jugando billar (en su variante de Chicago pues para nosotros entonces la carambola era cosa de viejos) y la pasábamos comiendo unos sandwiches gigantes y cerveza congelada. También compartimos el gusto por la lectura, pero hubo dos cosas que me alejaron de él: su concepción sobre las mujeres y su adoración a niveles ridículos por las casas reales.

Se sabía al detalle la vida y milagros de todos los reyes y reinas que había existido en la historia de España, el Reino Unido y Francia, las más representativas y rancias de Europa, así como de los zares rusos y en particular de Pedro el Grande y Catalina la Grande y tenía una admiración particular por la reina Victoria (la más retrógrada de las monarcas probablemente de la historia mundial y también una gran cínica), por la moral victoriana y para él no hubo suceso más importante en la historia contemporánea que vivimos que el ascenso al poder de la Reina Isabel II. Creo que era capaz de nombrar a todos los miembros de la nobleza de ese país, algo que no sé para qué le servía.

Nombraba con una exactitud asombrosa cosas que habían entrado por uno de mis oídos, o por ambos y habían salido por o el otro o por el mismo con gran rapidez, como quienes eran el Duque de Cambridge, el Príncipe de Gales, el Duque de Devonshire, el Duque de Lancaster, el Duque de Marlborough, el Duque de Norfolk, el Duque de Northumberland, el Duque de Richmond y el Duque de York, el Duque de Sussex, en Inglaterra; el Duque de Rothesay en Escocia; el Duque de Abercorn y el Duque de Argyll en Escocia; el Duque de Abercorn en Irlanda; los Duques de Buckingham, Hamilton, Manchester, Newcastle y Portland en Gran Bretaña; los Pares del Reino Unido, Duques de Cambridge, Edimburgo, Gloucester, Kent, Sutherland, Wellington, Westminster, Windsor y York, los Marqueses de Bristol, Londonderry, Normanby, Winchester y Ailsa, los Condes de Albemarle, Bridgwater, Lincoln, Pembroke, Perth, Portland, Ross, Sandwich, Scarborough, Suffolk, Warwick, Wesse, Nottingham, los Vizcondes Hereford, Midleton, Bearsted, Portman y Torrington, los Barones Berkeley, Clinton, Cromwell, Darcy de Knayth, Ros, Dudley, Howard de Walden, Latimer, Seaford y Willoughby de Eresby. Y era obsesivo con la historia de los diferentes personajes que ostentaron el título de Earl de Sandwich, comenzando por el Almirante Edward Montagu y su descendencia hasta el onceno Earl John Edward Hollister Montagu nacido en 1943, una historia de cuatro siglos.

Entendía, por su importancias histórica, que conociera las vidas de personajes como Ana Bolena, María, Isabel y Margarita Tudor, Enrique, María y Ana Estuardo.

Pero Enrique VIII de Inglaterra era otra de sus obsesiones. Minimizaba la condición de vago, obeso, barbudo, sucio y enfermo de gota constantemente del monarca, y gozaba mostrando su verdadera cara: un hombre enérgido, lujurioso, dispuesto siempre al combate o lucha de cualquier tipo y en su juventud atractivo para las mujeres, experto jinete, amante de las artes, con dotes para la arquitectura sin dejar de ser un tirano como correspondía a un rey. Cortó más cabezas y tuvo más mujeres que ningun otro rey y no fueron solo sus esposas, sino que pasaron a la historia como personajes destacados, tales como Catalina de Aragón, hija de los Reyes Católicos Fernando II e Isabel I (la no aceptación de su divorcio provocó la ruptura con la Iglesia de Roma y la creación de la iglesia Anglicana); Ana Bolena, que fue acusada de adulterio, incesto y otras cosas que le permitieran a Enrique casarse con otra y Ana se hizo famosa porque fue decapitada y con un cinismo extremo le dijo al verdugo: “no te daré mucho trabajo, tengo el cuello muy fino”); Juana Seymour; Ana de Cléveris; Catalina Howard, prima de Ana Bolena, terminó como ella decapitada; Catalina Parr fue la única que lo sobrevivió aparentemente por ser práctica en el tema pues tuvo cuatro maridos en total. También tuvo un hijo con Isabel Blount y es imposible determinar las miles de amantes que tuvo. Enrique VIII ejerció el poder más absoluto entre todos los reyes ingleses, asumiendo además el cargo de jefe supremo de la Iglesia, disolviendo los monasterios y uniendo a Inglaterra con Gales.

Volviendo a la reina Victoria, con 64 años en el trono, tuvo el reinado más largo hasta entonces en la historia de los monarcas británicos (luego superado por el de su tataranieta Isabel II coronada en 1953), y los cambios culturales, políticos, económicos, industriales y científicos que tuvieron lugar durante su reinado fueron extraordinarios, pero probablemente hubieran ocurrido con cualquier otra monarca pues se trató de un avance mundial, del que sin duda el Reino Unido supo aprovecharse. Cuando Victoria ascendió al trono, Inglaterra era esencialmente agraria y rural; a su muerte, el país se encontraba altamente industrializado y la mayoría de su territorio ya estaba conectado por una red ferroviaria que seguía expandiéndose.

La sociedad en la época victoriana era una exageración total de moralismos y prejuicios, valores puritanos entre los que se preconizaba la laboriosidad, el ahorro, el cumplimiento de las normas y reglas de la fe y la moral sin tacha.

A pesar de que el país estaba regido por una reina, el machismo era extremo. Los hombres dominaban todo y las mujeres estaban destinadas al hogar y los hijos y a cumplir una moral sin resquebrajamientos. “Ana Karenina”, la novela de Leon Tolstoi, es un buen ejemplo de la moral victoriana, mientras que “Oliver Twist” de Charles Dickensa es el más exacto reflejo del trabajo infantil en la era victoriana. La condena por sodomía a Oscar Wilde con Lord Alfred Douglas a dos años de trabajos forzados fue otra muestra del clima moral existente.

Expertos afirman que sin el reinado de Victoria y la moral que impuso, el psicoanálisis no hubiera existido y Sigmundo Freud no hubiera desarrollado sus tesis. Al relacionarse socialmente la vagancia con los excesos, la pobreza con el vicio y el vicio con las bajas pasiones de tipo animal y el sexo, la castidad era una virtud excelsa. Por eso la insatisfacción femenina era un trastorno psíquico y para evitarla la reina alargó los manteles para que no se vieran las piernas de una mujer. Pero en realidad proliferaba socialmente el adulterio y la prostitución a gran escala, de forma tan frecuente que provocó que apareciera Jack el Destripador en 1888, el que creó un clima de terror, sobre todo entre las prostitutas y mujeres y nunca fue detenido. No importaba que el promedio de vida fuera de cuarenta años, que la tuberculosis fuera algo corriente y los niños fueran terriblemente explotados en los peores trabajos incluyendo la minería.

Al margen de todo ello, lo que más caracterizó a la era Victoriana fue la doble moral sexual, teniendo como primer exponente a la propia reina. El consumo de opio era extenso, sobre todo entre cortesanos y la reina lo consumía en forma de goma de mascar con cocaína, Sherlock Holmes se inyectaba drogas y el opio era una droga considerada “social”.

Los filósofos y escritores cuestionaron el estatus social de la nobleza y el que el gobierno solamente favorecía a las clases altas y no se ocupaba para nada de los pobres.

Contradiciendo lo que imponía a los demás, la reina Victoria con su insaciable apetito, se convirtió en una gorda sin límite para los más exquisitos manjares, contrajo matrimonio con su primo con el que tuvo nueve hijos y 42 nietos, los que se casaron en su mayoría con miembros de la realeza europea. Al morir su esposo, rompiendo nuevamente la moral victoriana, tuvo una larga aventura amorosa con un guardabosques llamado John Brown, que fue comidilla de los cortesanos londinenses y lo que no le importó en lo absoluto, ni siquiera los reclamos de su hijo y heredero, el príncipe Bertie. Y esta la aventura de Abdul Karim, un ayudante musulmán hindú de la reina que la acompañó en los últimos quince años de su vida y del cual no se separaba nunca en ningún sentido. Victoria lo colmó de honores y le dió tierras en el protectorado hindú y tras su muerte fue enviado de vuelta a la India. Probablemente ahí hubo algo más que afecto.

Volviendo a Isabel II, la del más largo reinado, ha tenido aciertos y desaciertos, pero sin duda ha sabido campear el temporal en una era en que Gran Bretaña ha dejado de ser la gran potencia colonizadora y ha visto reducido su papel en la economía mundial, situación agravada ahora por decidir ir en contra de la lógica con su política nacionalista y el Brexit. Pero seguramente a la reina Isabel le preocupe más los escándalos que ha dado su marido, un vacilador incapaz que nunca ha aportado nada a la humanidad, los desplantes de su hijo Carlos, heredero del trono con su abandono a la popular Lady Di, y más recientemente la decisión del príncipe Enrique, duque de Sussex y su esposa, la norteamericana Meghan Markle, anunciaron su intención de abandonar el papel que desempeñaban en la familia real británica y volverse independientes económicamente. Probablemente estos hechos le impacten más a la reina Isabel que lo que ocurre en el mundo.

Las monarquías actuales son solamente un poder simbólico en el mundo y las naciones quieren deshacerse de ellas porque lo único que representan es un gasto. Pero aunque actualmente existen 26 monarquías, representadas por una gran cantidad de reyes, reinas, emperadores, sultanes y emires que gobiernan o reinan en un total de 43 países, los únicos que tienen poder real son los de los países árabes o musulmanes, o pequeños países en los que ejercen además la función de gobernantes como son Liechtenstein, Luxemburgo, Mónaco o el Vaticano, mientras que destacan como monarcas sin poderes Noruega, Suecia, Los Países Bajos, España, Dinamarca, Bélgica. En la monarquía británica, la reina es la jefa de estado del Reino Unido y de otros quince países que integran la Mancomunidad Británica de Naciones. Aunque constitucionalmente ejerce el poder político, en realidad las prerrogativas no las ejerce personalmente la reina Isabel II, sino ministros que actúan bajo su voluntad, encabezados por el Primer Ministro.

Ya la reina Isabel no baila el danzón. En realidad ni el danzón ni nada.

El Rock ‘n’ Roll llegó para quedarse (Rock ‘n’ Roll is here to stay)

Aunque ya hace años que no tengo tocadiscos, pero me siguen llamando la atención los discos de vinil, y en una tienda de souvenirs y antigüedades en Fort Myers, me encuentro el Long Playing “Rock ‘n’ Roll Is Here To Stay”, de Chuck Berry, junto con otra curiosidad que fuera de mis primeros álbumes y del propio artista, con una portada para comérsela: “One dozen Berrys”, doce magníficas piezas representadas en la carátula por unas apetitosas fresas, esta fruta que es algo prohibido en Cuba y que después en México, viviendo en Irapuato, las capital mundial de la fresa, comería en cantidades equivalentes a varias de mis vidas.

Pero todo se remonta a varias décadas atrás. En una emisora habanera llamada Radio Kramer, comenzaron a escucharse desde mediados de los años cincuenta, una música muy atrayente para los jóvenes y escandalosa para los mayores. Había nacido el Rock and Roll.

Como los ahora viejos detestamos al reguetón, salvando la gigantesca distancia que hay entre ese engendro y el rock, nuestros padres aborrecían el entonces nuevo género y sus alborotadores bailes y le auguraban poco tiempo de vida. Ojalá no nos equivoquemos nosotros con el reguetón como lo hicieron nuestros ancestros con la música que nos ha marcado a nosotros y a nuestros hijos y a parte de nuestros nietos y que no se ha puesto vieja.

Hay quienes sitúan su origen en 1954, con el gran éxito de Bill Haley “Rock Around the Clock” mientras que otro le otorgan este título a Elvis Presley con su “Don’t be cruel” o a Chuck Berry con “Maybelline”.

Lo cierto es que no se puede definir exactamente quién fue el inventor del Rock and Roll. El gran ídolo o leyenda fue sin duda Elvis Presley, pero junto otros como Chuck Berry o Bill Halley despuntaron y dieron vida a este nuevo género, resultante de la mezcla de otros como el Rythm & Blues, el Country, el Jazz, el Gospel, el Doo Wop, el Blues, el Western o el Hillbilly.

Pero sin duda hay un nombre al que se le considera clave en el desarrollo de esta música, Sam Phillips, director de Sun Records, que permitió que en su sello Sun dieran sus primeros pasos el propio Elvis, Jerry Lee Lewis y algunos otros. Un conocido disc-jockey bautizó a los nuevos ritmos como “Rock and Roll”. El término rock and roll era empleado hasta ese momento por los afroamericanos con un sentido sexual, pero realmente significa “mecer y rodar”.

El cantante más destacado fue Elvis Presley, su guitarrista estrella Chuck Berry, su mejor pianista Jerry Lee Lewis y sus bandas más importantes Little Richard, Bill Haley and The Comets. Pero todos ellos crearon una música completamente nueva, como si hubiese surgido de la nada pero que tenía lo mejor de muchas vertientes..

Hubo varias vertientes del nacimiento del Rock and Roll, todas relacionadas con la región en donde surgieron. Mientras que Elvis, en Memphis Tennessee, era una mezcla del blues, el country y el rythm and blues y con un especial acento del country, lo que hoy se conoce como rockabilly, Chuck Berry se basó en el blues de Chicago, por lo que se acentúa en el elemento emblemático de este género: la guitarra eléctrica y Bill Halley y Little Richard hacen uso prioritario del saxofón y el piano, elementos primarios del rythm and blues sureño.

El Museo del Salón de la Fama del Rock and Roll, en Cleveland, Ohio, Estados Unidos fue inaugurado en 1995 y en su ceremonia inaugural participaron Little Richard, Bob Dylan, Al Green, Jerry Lee Lewis, Aretha Franklin, Bruce Springsteen, John Fogerty y Chuck Berry entre otros. Cleveland fue escogida porque fue allí donde Alan Freed acuñó el término “Rock and Roll”

En ese Museo hay una frase que señala”: “Si bien no se puede decir que alguna persona inventó el rock and roll, Chuck Berry es el que más se aproxima de entre cualquier individuo a ser el que puso todas las piezas”. Y muchos coincidimos con esa definición, aunque yo tengo una preferencia particular por el que a pesar de su corta carrera fue todo un genio: Buddy Holly, que es Rock and Roll en su estado más puro.

John Lennon había lanzado antes en un programa de televisión una afirmación atrevida: “Si tienes que darle otro nombre al rock and roll, podrías llamarlo ‘Chuck Berry'”. Bruce Springsteen dijo tras la muerte de Berry: “Chuck Berry fue el mejor guitarrista y compositor del rock and roll que vivió. Un gigante de todos los tiempos”. Mientras que Stevie Wonder expresó: “Sólo hay un verdadero rey del rock and roll y su nombre es Chuck Berry”, los Beach Boys dijeron que Chuck “escribió todas las grandes canciones y probó todos los ritmos del rock and roll”, a la par que Eric Clapton concluyó :”Él hizo la ley”.

Dan fe de estas expresiones números tales como “Roll Over Beethoven” (la canción que para mí puede representar al género como tal), “Johnny B. Goode”, “Sweet Little Sixteen”, “Rock and Roll Music”, “Maybelline”, “Reelin and Rockin”, “Shake, Rattle and Roll”, “School Days”, “Thirty Days”, “You never can tell”, “Carol”, “Memphis Tennessee”, “Little Queenie”, “Back in the USA”, “Nadine”, “No particular place to go”, “You never can tell”, “Oh baby doll”, “Low feeling”, “You can’t catch me” y muchas otras.

Y también fue muy famoso y admirado su “paso de pato”, un pasillo realizado durante un solo de guitarra donde saltaba en un solo pie mientras el otro lo mantenía en el aire y en la dirección hacia donde iba y agitándolo hacia arriba y hacia abajo, al que le añadió un movimiento de cabeza de delante a atrás como hacen los patos.

Así nació el dominio de la guitarra eléctrica y numerosas bandas e intérpretes, a lo que siguió la oleada de la llamada “invasión británica”, dejó para siempre escritos nombres presentes durante medio siglo de ese país, norteamericanos y canadienses tales como: The Beatles, The Rolling Stones, The Who, Gene Vincent, Roy Orbison, Buddy Holly, Don McLean, The Everly Brothers, Fats Domino, Neil Young, Led Zeppelin, Deep Purple, Queen, Rod Stewart, Pink Floyd, Elton John, Grand Funk, AC/DC, Scorpions, The Heartbreakers, Bob Marley, The Police, Us, Van Halen, The Cure, Tom Waits, ZZ Top, Lynyrd Skynyrd, The Allman Brothers Band, The Guess Who, Toto, Foreigner, Journey, Boston, Tom Petty, Bon Jovi, Motley Crue, Poison, Quiet Riot, White Lion, Whitesnake, Red Hot Chili Peppers, Metallica, Megadeth, Pantera, Skid Row, Stone Temple Pilots, Alice in Chains, The Smashing Pumpkins, Radiohead, Limp Bizkit, Kid Rock, Aerosmith y los míticos Creedence Clearwater Revival y Guns and Roses, eso por solo mencionar mis preferidos.

De ahí derivaron otros géneros sobre todo uno que ha traspasado el tiempo: el Rock, el cual también ha tenido numerosas ramificaciones. Del Rock and Roll surgieron el Blues Rock, el Rock Clásico, el Country Rock, el Jazz Rock, el Rock Alternativo, el Soft Rock, el Hard Rock, el Rock Rrogresivo, el Punk y el Heavy Metal entre otros.

También el rock fue soporte de los movimientos sociales y culturales, como la contracultura hippie en los años sesenta. El rock se ha asociado al activismo político y a los cambios sociales sobre el racismo, el sexismo y las drogas, y ha sido visto como una forma de protesta contra el consumismo y el conformismo de la sociedad.

Por eso el Rock and Roll, desde los inicios de la revolución, cuando ya los cubanos conocían a sus primeros intérpretes y las fiestas juveniles estaban dominados por estas melodías y sus bailes, fue suprimido y considerado contrario a la ideología revolucionaria, por lo que los amantes de este género, entre ellos todos los jóvenes casi sin excepción, se vieron obligados a buscar radios con potencia suficiente para poder escuchar estaciones del sur de la Florida y hasta de otros estados cercanos, para oír la música que les gustaba y estaba de moda. WQAM de Miami y KAAY de Little Rock, Arkansas, logró superar la estigmatización oficial del Rock and Roll y su eliminación total de los medios de difusión cubanos. No importaba que en el noticiero ICAIC que ponían en todos los cines, los grupos de rock aparecieran como unos chimpancés tocando varios instrumentos con el rock de fondo, en realidad los monos eran los que trataban de imponernos el gusto por música que no era de nuestro agrado y que más temprano que tarde desapareció, como fue el famoso Mozambique, una tribu tocando cien tambores y haciendo un ruido infernal que era de la preferencia de muy pocos.

El Rock and Roll trascendió la música y creó todo un vestuario y una forma de vida a su alrededor, pasando de una vestimenta conservadora hacia cambios más liberales como pantalones largos y sueltos, camisas abiertas y después el pelo largo en los hombres y en las mujeres pelo largo despeinado, tenis o zapatillas bajas y faldas plegadas y hasta la rodilla. Muchos nos dejamos las patillas imitando a Elvis Presley, después algunos se dejaron el pelo largo y surgió la moda escandalosa de usar aretes los hombres, mientras la extravagancia en el vestir de algunos grupos hizo que algunos pensaran que el género se identificaba con el homosexualismo.

El Rock no ha sido sólo una corriente musical sino también un fuerte elemento influenciador de la moda. Todos aquellos que le pronosticaban una corta vida, “se cogieron el culo con la puerta”, como dirían nuestros abuelos, afortunadamente para los que nos gusta esa expresión musical, sin la cual el mundo sería otro. Pero también muchísimos “nos cogimos el culo con la puerta” cuando esperábamos que el gobierno de la revolución comunista o más bien fidelista no iba a durar más de un par de años. Se murió al fin su inventor y su heredero es un muerto viviente junto con una pléyade de viejos payasos locos, pero el maleficio continúa.

El gangsterismo en Cuba

No voy a referirme a los años cincuenta en Cuba, cuando la Mafia internacional, de cuello blanco, en complicidad con el gobierno de Batista, desarrolló y proyectó inversiones colosales en la industria turística e instalaciones de juego. Esos eran tiempos, al margen de la situación social de inestabilidad e inconformidad política, realmente tranquilos desde el punto de vista de lo que conocemos como gansterismo, porque la violencia estaba centrada en la lucha contra el régimen.

El gangsterismo, palabra derivada del inglés, donde “ gang” que significa pandilla o banda de delincuentes y gángsters son sus miembros, se formó inicialmente por grupos de inmigrantes italianos relacionadas con la mafia, principalmente siciliana y que despuntaron a partir de la Ley Seca de 1919 que prohibió la venta de bebidas alcohólicas y que les dio fama y riquezas conjuntamente con un poder casi absoluto sobre todas las instituciones a nivel local. Al Capone, Lucky Luciano, Sam Giancana, Frank Costello, John Dillinger, Clyde Barrow, Bonnie Parker, son algunos de sus principales exponentes y Roosevelt, aboliendo la Ley Seca acabó con el auge del gangsterismo pero no pudo erradicar al crimen organizado porque ya contaba con raíces en los cimientos del país.

Con la gran influencia de lo ocurrido con la Ley Seca, el contrabando y las actividades ilícitas asociados a ello gracias a la cercanía de Cuba con Estados Unidos y además por la gran influencia del modo de vida norteamericano en nuestro país, el gangsterismo, ayudado además por la corrupción imperante en la Cuba republicana, tuvo un gran caldo de cultivo para crecer.

Durante los años de la Segunda Guerra Mundial la situación creada por este conflicto trajo escaseces y con la especulación y el mercado negro que surgieron, el gangsterismo tuvo un alza importante, y a partir de las elecciones generales, realizadas por vez primera por el voto directo para todos los cargos electivos según lo dispuesto en la Constitución de 1940, la Alianza Auténtica Republicana ganó por un amplio margen comenzando un período de dominio de los Auténticos que duraría hasta 1952 cuando el presidente saliente, Fulgencio Batista, retomaría el poder mediante el golpe de estado del 10 de marzo de ese año.

Como ya durante la guerra había impactado en el pueblo el crecimiento desmedido de los grupos o bandas de gangsters y la corrupción y el nepotismo como estilo de gobierno, se creó un clima creciente de inseguridad, porque las pandillas rivales solucionaban a tiros sus aspiraciones de puestos gubernamentales, asignación de obras públicas, concesiones de todo tipo o dominio de mercados. Y los grupos delictivos eran financiados por personajes del gobierno a diferentes niveles.

Vinieron las siguiente elecciones y continuaron los Auténticos en el poder, ahora sustituyendo a Grau San Martín por Carlos Prío. Ambos gobiernos ocasionaron no solo una gran desilusión en la población que había votado masivamente por ellos, sino que se creó una crisis de las instituciones estatales y aparecieron voces que reflejaron el rechazo público a la corrupción y a la estabilidad ciudadana. Como parte de ello hasta las organizaciones obreras fueron penetradas por el gangsterismo y la Confederación Nacional Obrera fue dominada por un gangster con el apoyo del gobierno de Grau: Eusebio Mujal. La represión, como parte de la Guerra Fría, aumentó con el asesinato a dirigentes obreros como Jesús Menéndez y las fricciones sociales derivadas de estos hechos.

El gangsterismo llegó a tener tanta fuerza y llevó en 1947 a una situación tan inestable que obligó al gobierno a destacar fuerzas del ejército para patrullar las calles.

Esta etapa estuvo marcada por un grupo de personajes que destacaremos, “los muchachos del gatillo alegre”, como los bautizara el descerebrado presidente Ramón Grau San Martín, como fueron:

El colorado

Orlando León Lemus, conocido por “el Colorado”, había sido un revolucionario en la lucha contra el dictador Machado, y se convirtió en un gángster al que Prío le otorgó cuatrocientas botellas para que fueran distribuidas entre sus compinches. Fue llevado a juicio y salió absuelto y se enriqueció durante los gobiernos Auténticos, pero tras llegar Batista al poder fue perseguido, capturado y asesinado en 1954.

Grau había favorecido a dos grupos que llegaron a tener mucha notoriedad, uno era el de Mario Salabarría y el otro el del Colorado. Otro grupo importante era el encabezado por Emilio Tro, que había estado en el ejército norteamericano durante la Segunda Guerra Mundial y había sido nombrado por Grau Jefe de la Academia de la Policía y tenía posiciones políticas extremas. Pero por diferencias entre ellos el gángster fue tiroteado en la calzada de Ayestarán en mayo de 1947, pero resultó ileso y acusó a Tro del hecho, comenzando una guerra entre ambos grupos. Cuatro meses más tarde el carro de Tro fue asaltado a balazos y reconocieron a los agresores que eran gente del grupo de el Colorado, y una semana más tarde esa persona fue muerta a tiros.

El hecho no quedó allí sino que siguió con los sucesos de Orfila que narraré más adelante. Pero El Colorado protagoniza una espectacular fuga de su amigo y compinche, Policarpo Soler, al que asaltando una garita del Castillo del Príncipe, amenazando al custodio de muerte pues iba a rescatar a su “hermano” Policarpo. Ambos se habían conocido en México y se identificaron como amigos rápidamente a pesar de la amistad de Policarpo con Batista y el con Carlos Prío. Esa fuga del Príncipe, al estilo de las mejores películas policíacas y que contó con ayuda interna también, fue uno de los mayores escándalos noticiosos del momento e hizo que rodaran varias cabezas.

El Colorado y Policarpo, junto a Jesús Gónzalez Carta “el Extraño”, José Fayadel, “el Turquito”, uno de los que escapó del Príncipe junto con Policarpo y unos pocos más eran la crema y nata de los gangsters cubanos de la época. Esta fuga del gángster Policarpo Soler y cinco de sus compinches el 25 de noviembre de 1951 se realizó descendiendo tranquilamente desde la azotea, cruzaron los fosos y llegaron a la calle G sin ser detectados por los custodios que aparentemente estaban dormidos o miraban hacia otra parte.. Como si la fuga del Chapo Guzmán en México, tan sonada en nuestros días, hubiera tenido un antecedente ejemplar en ella.

El fin de El Colorado ya lo narré en otro artículo y detrás de ella no había para nada justicia contra un delincuente, sino uno de los tantos ajustes de cuenta entre los grupos gangsteriles.

Entonces era un niño y tenía un compañerito de juegos que vivía en la acera del frente de mi casa en el barrio del Cerro, cuyo tío, conocido por “Tronco ‘e Yuca”, que iba a ver a su madre en un tremendo carro, creo que era un Packard o un Chrysler muy lujoso, y que era el piloto de El Colorado, tuvo un accidente donde la avioneta se estrelló y falleció, por lo que al enterarme, pude ver como el famoso mafioso fue a darle las condolencias a la señora y para ello varios carros con hombres armados, con una ametralladora Thompson, cerraron la cuadra, haciendo ostentación de su poder. Hasta ese momento solo había visto eso en la película “El enemigo público” de James Cagney.

Policarpo

Policarpo Soler no parecía una persona agresiva, sino que daba más bien la imagen de un político, un hombre exitoso y amable, siempre bien vestido y aseado y muy gracioso y alegre, pero en realidad era un gangster y de los peores.

Si a El Colorado le habían dado cuatrocientas botellas, Policarpo pudo disfrutar de unas seiscientas, aunque queda como un aficionado cuando se compara con el senador del partido Auténtico por Las Villas, Miguel Suárez, a quien se le asignaron cinco mil y por ello lo apodaban “el Zar de Las Villas.

La botella fue una institución en la vida cubana de antes de 1959 y aunque no se reconoce, también y yo diría que más solapada aunque no menor en la etapa revolucionaria. La “Botella” era un sueldo que se percibía del gobierno en cualquiera de sus instancias sin que el beneficiario hiciera ningún trabajo a cambio. Se remonta a los tiempos del gobierno de Menocal, de 1913 a 1921, cuando en los juegos de Jai Alai, había unos empleados que les llevaban botellas con agua fría a los pelotaris y gracias a ello entraban gratis al frontón y disfrutaban el juego. A partir de ello, en el gobierno de Menocal se empleó la “Botella” para identificar al que cobraba sin trabajar.

Policarpo empezó joven sus tareas delictivas en su natal Camagüey. Pero contrario a la llógica, gracias a esos actos ilegales fue designado teniente de la Policía Nacional durante casi todo el gobierno de Batista hasta el año 1944, cuando su participación en un asesinato tuvo que irse a México, donde hace amistad con El Colorado y conoce a su adversario Emilio Tro, tambié exilados por los sucesos de orfila. Al regresar en 1948 se ve implicado en el asesinato de Noel Salazar, jefe de la Policía del Ministerio de Educación y en la muerte de Justo Fuentes Clavel, vicepresidente de la Federación Estudiantil Universitaria y amigo de Tro. A su vez atenta contra Wichi Salazar, también del grupo de Tro y a fallar el asesinato lo acecha hasta que lo ametralla en Ayestarán y 20 de mayo. Después continúa su atentado contra miembros de la UIR de Tro y mata a dos y deja varios heridos.

Ante la creciente ola de inestabilidad social, el presidente Prío convoca a los jefes de facciones a un acuerdo de paz para que se reintegraran a la vida normal o abandonaran el país. Es así que Policarpo, amigo de Prío y al que le prometió no participar en actos de violencia, se muda a Matanzas y se postula como Representante a la Cámara para las elecciones de junio de 1952, pero es apresado por la Guardia Rural como prófugo de la justicia durante seis años, aunque en la cárcel se le da un trato especial porque amenazó con hacer revelaciones a la prensa en caso de ser enjuiciado.

Policarpo no cumple su palabra y le comunica al jefe del penal que el primer ministro Tony Varona iría a visitarlo, pero en realidad fueron otros lo que lo hicieron y ante la negativa de los guardias de permitir su acceso, una mujer se acercó a las rejas y le entregó a Policarpo una pistola Colt 45, con la que atacó al guardia que lo conducía y logró escapar. Un hecho simpático fue el del jefe de la prisión, Florencio Sáinz, que le dice: “¡Policarpo, por tu madre, no te vayas! Mira que me perjudicas…”. Tal parecía una escena digna de películas como “El Padrino” de Francis Ford Coppola.

Policarpo se va nuevamente a La Habana, donde lo visitan varios ministros en su casa, pero la gente de la UIR de Tro denuncian al Servicio de Inteligencia Militar (SIM) el paradero del gángster, por lo que lo detienen y llevan al Castillo del Príncipe, donde protagoniza un escape al estilo de Prison Break, la famosa serie televisiva.

En el Príncipe, popularmente conocido como “la loma” se vio sometido a fuertes medidas de seguridad, de lo que se quejó. Se presionó a los magistrados para que no lo condenaran, y al no ceder los jueces, cada vez que debía ser presentado a juicio, aparecía un certificado médico de la enfermería del penal y mientras tanto se preparaba su fuga, detallada en la cita sobre “El Colorado”, su ejecutor.

Para quitárselo de encima, el régimen de Batista envió a Policarpo para España con mucho dinero, pero de España se fue a Venezuela y después a Santo Domingo, donde se convirtió en uno de los principales asesinos a sueldo de Trujillo. Aunque no se conoce exactamente, se dice que tras la huida de Batista, Trujillo le pidió a Fulgencio varios millones de dólares por su estancia en la Isla y que al entregarlos, Policarpo quiso darle la mala y quedarse con parte del dinero, por lo que surgió un violento choque con el dictador dominicano. Policarpo preparó su fuga pero no fue lo suficientemente rápido, Trujillo llegó a su casa sin escoltas, compartieron y al despedirse los sicarios del sátrapa, escondidos, abrieron fuego y mataron al gángster y sus hombres, aunque hay otras fuentes que dicen conocer que Policarpo fue fusilado en la cárcel de La Cuarenta, una cárcel secreta creada para interrogar, torturar y asesinar a los opositores y donde había hasta una silla eléctrica y otros dicen que Policarpo fue ametrallado tras matar al director del Banco de Reserva que se negó a darle el dinero que quería extraer..

Lo cierto es que vivió a plomo y murió a plomo.

Emilio Tro

Emilio Tró Rivero fue veterano de la Guerra Civil Española y del Ejército de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial y sufría de psicosis de guerra. Perseguido por el gobierno de Batista huye a México y después a Estados Unidos, donde se alista al ejército. Al regresar a Cuba tras la finalizar el conflicto, creó la Unión Insurreccional Revolucionaria (UIR), una organización que creía febrilmente en la violencia como método. Solo hay que decir que uno de sus integrantes fue Fidel Castro, otro psicótico.

Su grupo revolucionario quería quitarle el control de la Universidad de La Habana a la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) de Manolo Castro y al Movimiento Socialista Revolucionario de Rolando Masferrer, ambos grupos integrados por gente de pensamiento de izquierda partidarios de una revolución.

Los objetivos de Tro eran la toma del poder para imponer un régimen revolucionario, pero sin embargo Tro no era partidario de las ideas comunistas y no tenía un programa político. Por suerte en esos momentos el movimiento de Tro no salió de la esfera de la especulación y acabó con la matanza de Orfila, aunque uno de sus seguidores logró cumplir parcialmente sus ideas y destruir a Cuba, por supuesto Fidel Castro.

Fidel Castro y la UIR

Siempre se ha hablado de Fidel Castro como un rebelde, pero no se ha profundizado mucho en su carácter de matón. En la Universidad se habían hecho fuertes los grupos del llamado “bonche” integrado por grupos de estudiantes que ejercían actividades delincuenciales al igual que las pandillas apoyadas por los gobiernos auténticos. En lugar de aprovechar su condición privilegiada de hijo de un terrateniente y estudiar, Fidel se dedicó a propiciar el caos.

Fidel Castro era un insignificante pandillero de la Unión Insurreccional Revolucionaria, a la que se incorporó a sugerencias de Rafael Díaz-Balart, más tarde su cuñado, el que se apartaría del pandillerismo mientras que Fidel Castro continuaría muy cerca de Emilio Tró, después que no fue aceptado por Manolo Castro en el Movimiento Socialista Revolucionario.

Fidel fue el organizador junto a Tro de una banda de asesinos bajo el nombre de la Union Insurreccional Revolucionaria, cuyo crimen mas sonado fue el asesinato por Fidel y otros dos sicarios, de Manolo Castro Campos el 22 de febrero de 1948 enfrente al Cinecito en San Rafael. Manolo era expresidente de la FEU y Director Nacional de Deportes y militaba en el Movimiento Socialista Revolucionario (MRS). Se dice que el secretario de Deportes del gobierno fue ordenado a matar por la mafia, en reunión de Meyer Lansky y Santo Trafficante celebrada en el Hotel Nacional con los jefes de las bandas mas fuertes de La Habana, incluyendo la UIR a la que pertenecía Fidel Castro.

En el entierro de Manolo Castro, Oscar Fernández Carral, sargento de la policía de la Universidad de La Habana, acusó a Fidel Castro de haber matado a Manolo Castro. Eso le costó la muerte pues fue asesinado al día siguiente y tuvo amplia repercusión en la prensa.

Este asesinato fue un escándalo internacional, pues los asesinos fueron detenidos y despues liberados pues uno de sus participantes era sobrino del presidente de la república. Eso provocó que aprovechando la situación en Colombia con Jorge Eliecer Gaytán, Fidel se fuera a ese país y así se libraba de la persecusion de Masferrer, líder del MRS y a su vez participaría en la eliminación de Gaytán por instrucciones de la mafia.

Durante El Bogotazo, Fidel y sus cómplices, instaron a asaltar los comercios y al saqueo y la destrucción, quemar oficinas gubernamentales, liberar a los presos y matar a mansalva y hasta a asaltar el Palacio Presidencial. Se vio a Fidel Castro armado con un fusil, vistiendo uniforme de coronel de la policía colombiana liderando a amotinados

También se le achacan otros atentados, como es el disparo por la espalda y herido de gravedad al lider universitario Leonel Gómez, el disparo a la pierna de Fernando Freyre de Andrade, el intento de asesinato a Rolando Masferrer por la galleta que le dió y los comentarios de que había asesinado a sangre fría al cabecilla de un grupo de descontentos con el Ché Guevara, designado por él como jefe de personal de los entrenamientos en México, aparte de que se ofreció como guardaespaldas de Chibás, el cual horrorizado lo mantuvo a distancia y el hecho conocido de que en sus años de estudiante sacaba sus notas a punta de pistola.

Este comportamiento mafioso de Fidel Castro fue el que empleó durante toda su vida, convirtiendo al gobierno cubano en una agrupación mafiosa de las peores.

La matanza de Orfila

En los alrededores del apeadero del tranvía llamado Orfila, en Marianao, en un reparto identificado con ese nombre y que realmente se llama Reparto Benitez ocurrió el lunes 15 de septiembre de 1947 uno de los hechos más graves de las luchas entre pandillas. La matanza fue protagonizada por agentes policiacos, con historial de lucha contra la dictadura de Gerardo Machado, pero que se convirtieron en corruptos y asesinos, y apadrinados y protegidos por el gobierno de Ramón Grau San Martín, paladín del relajo en que se convirtió la sociedad cubana con los gobiernos Auténticos, que de auténtico sólo tenía que eran auténticos delincuentes.

Una fuerza policíaca compuesta por doscientos hombres, a la que se sumaron pandilleros como El Colorado y otros gángsters, ametrallaron la vivienda en la que se encontraba Emilio Tro. El tiroteo fue digno de una batalla de la guerra mundial y duró tres horas.

Ese mismo día Mario Salabarría, jefe del Servicio de Investigaciones Especiales y Extraordinarias, supo que Tro estaba reunido en ese lugar con varios de sus amigos en la casa de Antonio Morín Dopico, jefe de la policía del municipio de Marianao.

A las tres de la tarde dos autos pasaron por el frente de la casa y la tirotearon e inmediatamente la casa estaba rodeada por más de doscientos efectivos a las órdenes de Salabarría atacandola con todo tipo de armas y hasta con bombas lacrimógenas. El Jefe del Ejército fue informado de la situación y mandó a detener el tiroteo y los tanques y las tropas llegaron sobre las seis de la tarde, viendo como cientos de miles de casquillos de balas cubrían la calle y la casa era una ruina. Dentro de la casa había varios muertos y heridos, y otros sobrevivientes,entre ellos Tro.

Los reporteros comienzan a fotografiar y a filmar y muestran el estado en que quedó la casa y a miembros de la banda de Salabarría disparando a Tro cuando auxiliaba a la esposa de Morín Dopico, así como a Panchito Pérez, reportero gráfico del diario El País en la entrada. Las imágenes cinematográficas captadas por Eduardo Hernández (Guayo) para el Noticiero Nacional pusieron en evidencia la culpabilidad de los hombres de Salabarría en los sucesos.

Un día después de la tragedia, miles de personas acompañaron hasta la necrópolis de Colón el cortejo fúnebre de las víctimas. Fuerzas del ejército custodiaron el sepelio, pero la noche anterior ya había comenzado la venganza por lo ocurrido en Orfila, cuando al bajar de una guagua en la calle San Lázaro uno de los hombres de Salabarría fue liquidado a balazos.

El balance de muertos y heridos dejado por estos “agentes del orden” estremeció a la opinión pública y el senador Eduardo Chibás acusó a Grau de la tragedia, mientras éste retiraba su apoyo a la expedición antitrujillista. Los sucesos de Orfila le pusieron la tapa al pomo a “Cayo Confites”, la aventura para derrocar a Trujillo. Grau, presionado por el General Genovevo Pérez Dámera, decidió abortar la expedición de Cayo Confites.

Una verdadera vergüenza nacional el caso Orfila.

Masferrer y sus tigres.

El último que describo y a su vez el más importante de los mafiosos cubanos fue sin duda Rolando Masferrer.

Rolando Masferrer Rojas fue uno de los más sangrientos entre los líderes de los grupos de acción o más bien pandillas paramilitares en las décadas del cuarenta y cincuenta.

Fue por naturaleza un matón, un guapetón, siempre imponiendo su voluntad y que atrajo a muchos jóvenes con la promesa de que iba a hacer una revolución a tiro limpio al estilo del legendario oeste, convirtiéndose en el jefe de un grupo de gángsters que nada tenía que ver con el antiguo combatiente por la República española, miembro del Partido Comunista de Cuba y el antimachadista de los años treinta, pasando a vivir extorsionando con el pretexto de financiar “la causa”.

No fue, a diferencia de otros líderes pandilleros, un ignorante, sino que era abogado, político, periodista, congresista, empresario y propietario del diario Tiempos.

A su regreso a Cuba después de la Guerra Civil Española, pasó a ejercer el periodismo, como jefe de la Sección de noticias internacionales del periódico Hoy del Partido Socialista Popular de Cuba.

Se vestía como un cowboy de las películas de vaqueros con sombrero tejano, botas, y el revólver en el cinto. Eso era usual en México, pero no en Cuba. No iba desarmado a ninguna parte y andaba con un par de pistolas encima y en el carro tenía algunas más, porque todo lo resolvía a tiros y así se batía en la calle con sus rivales, algunos de los cuales fueron víctimas de sus chantajes políticos.​ Se nombró a sí mismo jefe militar del grupo que iba a derrocar a Trujillo, desde Cayo Confites y tuvo un altercado con Fidel Castro, entonces del grupo de la UIR de Emilio Tro y en esa ocasión le dió una bofetada a Fidel delante de la tropa.

Cuando se habla de Cayo Confites me acuerdo del cuento chino de que al frustrarse la expedición y la Marina de Guerra detuvo la embarcación donde iban los que pretendían derrocar a Trujillo, Fidel Castro se lanzó al agua con su armamento en medio de la bahía de Nipe y nadó hasta las costas de cayo Saetía. Este mito de que Fidel había sido el único expedicionario que no había sido detenido y escapa a nado por la peligrosa y llena de tiburones Bahía de Nipe fue negada por el líder e intelectual dominicano Juan Bosch quien afirmó que en ningún momento alcanzó la costa a nado sino que lo hizo en un bote salvavidas y a escondidas del resto de la tripulación. Este hecho lo corrobora otro participante en la expedición, Carlos Franqui y añade que lo hizo junto con un amigo homosexual y con la complicidad de Pichirilo Mejías, el capitán del barco. Otro de los mitos creados por Fidel Castro para realzar su personalidad y alimentar su narcisismo. Por supuesto que del tortazo que le dió Masferrer en público no se habla nada.

Según le conviniera en ese momento, al mejor estilo de Fouché, fue aliado de Grau y después de Prío y cuando vio que tenía suficiente poder y caudal, gracias a negocios turbios donde extorsionaba a grandes niveles y le hacía venderle forzosamente sus tierras a campesinos orientales, gracias a la tolerancia de Prío, creó su Periódico Tiempo en Cuba y logró un puesto en la Cámara de Representantes. Al llegar el 10 de marzo de 1952 y el golpe de estado de Batista, se atrinchera con seguidores en la escalinata de la Universidad de La Habana como forma de enfrentar el golpe, pero no dispararon un tiro.

Pocos meses después, este opositor del golpe mostró su faceta camaleónica y de cambia casaca, al aparecer en un periódico abrazado a Batista en una cena en homenaje al presidente de facto. En 1954 e electo senador por Oriente en unas elecciones donde votaron más gente que los electores inscriptos.

Y no podía ser otro sino Masferrer uno de los principales asesores de Batista en las negociaciones con la mafia italo-norteamericana representada por Meyer Lansky y Santos Trafficante, donde se lograron concesiones para la explotación de los casinos de juego y el desarrollo de éstos e instalaciones hoteleras en todo el malecón habanero, probablemente el mayor negocio y el más lucrativo de la mafia fuera de Estados Unidos.

El comunista arrepentido Rolando Masferrer, con el dinero aportado por Batista y la mafia, pudo organizar un grupo paramilitar de triste recordación, los Tigres de Masferrer, que sería el precursor de otros similares en varios países latinoamericanos años después y al que se le calculan varios miles de muertes, muchos inocentes. En esos tiempos crea también el diario Libertad en Santiago de Cuba, defensor de Batista y que sería más famoso por ser el único que tenía grandes fotos pornográfocas en su portadas y por otra cosa peor, el que aparecía acusado en el periódico, no tardaba mucho en ser encontrado asesinado.

A la caída del régimen de Batista, acompañado por una veintena de personas cercanas a él, Masferrer huyó a Key West en el yate Ola Kun II y ya en Estados Unidos se vincula a la primera organización contrarrevolucionaria creada en ese país, la Rosa Blanca, liderada por su antiguo compañero de la Cámara de Representantes y de su organización paramilitar, Rafael Díaz Balart.

En octubre de 1975 en Miami, al encender su carro, explotó en mil pedazos gracias as un explosivo C4 debidamente ubicado para despedirlo de este mundo, no se sabe si por Fidel Castro o sus enemigos declarados, que hacía tan fácilmente como tomarse un café.

Y desafortunadamente el peor de todos, el sobreviviente, logró con su personalidad histriónica, al estilo de otros presidentes contemporáneos, similares a él en maldad e ignorancia, regir los destinos y llevar a Cuba al abismo por más de medio siglo y contando.

La historia de las facciones pandilleras en Cuba es muy larga y complicada. Muchos de los que fueron revolucionarios contra la dictadura de Gerardo Machado y el golpe militar de Batista el 4 de septiembre de 1933 se unieron en grupos para combatir la corrupción y lograr estabilizar la democracia en la naciente república, pero esos ideales fueron olvidados y el ansia de poder llevó a luchas internas sangrientas entre esos grupos.

El desastroso (como casi todos desde 1902 hasta hoy) presidente Grau fue tan ingenuo que designó como oficiales policiales a algunos de esos delincuentes.propiciando atentados, asesinatos, traiciones e inestabilidad social, logrando que el gangsterismo se hiciera tan fuerte que llegó a estar por encima de la ley y del orden judicial, algo que después imitaría Colombia y en nuestros días México.

Y dejamos a propósito de trata un tema extremo: el robo del diamante del Capitolio, donde hasta el presidente de la república se comporta como un ladrón.